En marzo de este año arrancaban en los Centros de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADEs) de Almería y Vélez Rubio dos equipos de 40 personas desempleadas que desde entonces están trabajando de forma proactiva y cargados de ilusión, ayudándose mutuamente para alcanzar el mismo fin: conseguir empleo, por cuenta propia o por cuenta ajena.
Y ya están consiguiendo sus objetivos. Son las ‘Lanzaderas de Empleo y Emprendimiento Solidario’, una forma diferente de enfocar las políticas de inserción laboral que desde la Junta de Andalucía hemos puesto en marcha en 2014, primero como experiencia piloto y ya como un metodología que, por sus buenos resultados y coste prácticamente cero, esperamos que se extienda a cada vez más equipos de trabajo.
Si hay algo que caracteriza a las personas integrantes de las Lanzaderas de Empleo es la ilusión, el dinamismo y el compromiso con el grupo: han pasado de la desesperanza de verse sin trabajo durante mucho tiempo a volver a confiar en sí mismas, lanzarse al mercado de trabajo con autocandidaturas, sin esperar a que llamen a sus puertas, y a formar equipos de trabajo cohesionados en los que todos aportan y se autoorganizan para realizar tareas en beneficio del grupo.
Sólo hay que ver los lemas que ellos mismos han elegido para sus proyectos: ‘La mar de lanza2’, en la Lanzadera de Almería y ‘Caminando juntos para llegar más lejos’, en la de Vélez Rubio.
Y todo ello es posible gracias al refuerzo de sus competencias laborales, sus habilidades sociales, su motivación y el contacto con empresas y entidades empresariales que facilitan las Lanzaderas, a través de ese trabajo en equipo de todos y todas sus integrantes y con el asesoramiento de sus coordinadores, uno en cada proyecto, que son técnicos especialistas en apoyo a los emprendedores y empresas que desde hace años trabajan en la red Andalucía Emprende, perteneciente a la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía, y que además han adquirido conocimientos útiles para guiar a los ‘lanzaderos’ en su camino hacia el empleo.
Merece la pena dedicar estos recursos, este tiempo y esfuerzo a un programa que funciona, que en la experiencia piloto del año pasado ya supuso la mejora de la situación laboral del 70% por ciento de sus integrantes justo al finalizar el programa y que en las Lanzaderas de Almería y Vélez Rubio, cuando aún no han alcanzado su ecuador, ya ha facilitado que tengamos catorce inserciones laborales y cuatro ideas empresariales.
Las Lanzaderas no son nuevas en España: llevan años demostrando su eficacia en distintos puntos de nuestro país (actualmente hay 104 activas, su número crece cada año y van a ser exportadas a Italia), tras su puesta en marcha por la Fundación Santa María La Real, creada por el arquitecto y dibujante ‘Peridis’, una persona inteligente, con sentido común (y del humor) y un profundo compromiso social a la que tuve la oportunidad y suerte de conocer hace poco, en el Día de la Persona Emprendedora. Peridis, por cierto, fue también el ideólogo de las escuelas taller.
Por eso me sorprende cómo hay quien tiene la osadía de hablar y opinar desde el más profundo desconocimiento de lo que son las Lanzaderas de Empleo, de su funcionamiento, resultados y hasta su coste, asegurando que son caras e ineficaces, cuando la realidad es justo la contraria: las Lanzaderas funcionan con técnicos que ya forman parte de Andalucía Emprende y están consiguiendo ilusionar a sus integrantes y dotarles de recursos y competencias para que alcancen su objetivo: el empleo.
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