La inversión para modernizar el campo almeriense llega a 30 millones de euros

La resolución definitiva de las ayudas a la modernización del campo andaluz incluidas en el Programa de Desarrollo Rural (PDR) para el periodo entre 2014 y 2020 ya ha visto la luz. La Junta de Andalucía ha resuelto la convocatoria con unas ayudas por valor de 90,1 millones de euros, las cuales movilizarán hasta un total de 139 millones de euros destinados a mejorar las explotaciones agrarias y ganaderas. La provincia de Almería es la que recibe una mayor cantidad de este tipo de incentivos: una ayuda de más de 18 millones de euros para una inversión de 30,93 millones de euros, la cual será realizada por un total de 373 personas que se beneficiarán de estas subvenciones a la actividad agroalimentaria.

Críticas

El anuncio del Ejecutivo andaluz viene precedido por las críticas que, desde sectores políticos y sociales, se han vertido contra el retraso de las ayudas, que en el caso de la modernización de infraestructuras "llevan 17 meses de retraso", denunció la diputada popular en el Parlamento de Andalucía Rosalía Espinosa. Por su parte, el sindicato agrario Asaja Almería también se posicionó en esta misma línea, añadiendo a estas críticas el retraso en la convocatoria específica de invernaderos: "los agricultores llevan esperando la resolución definitiva desde diciembre".

Explicaciones

La Junta de Andalucía ha justificado que los retrasos se han debido al intento por parte del Gobierno autonómico para atender el elevado número de solicitudes recibidas. No en vano, el presupuesto inicial, que estaba previsto en unos 30 millones de euros, se ha triplicado hasta llegas a los 90 millones de euros finales a disposición del sector, de los cuales se beneficiarán un total de 2.372 solicitantes.

Modernización

Desde la Junta también defienden que Andalucía es "la comunidad que más presupuesto destina a la modernización de las explotaciones agroalimentarias, con diferencia" sobre el resto de regiones españolas. Las ayudas para cada beneficiario están destinadas a cubrir gastos asociados con las inversiones en activos necesarias para la mejora del rendimiento y la sostenibilidad de las mismas. Así, los gastos cubiertos tienen que ver con tarea de construcción, adquisición o reforma de inmuebles; compras de maquinaria, equipos y programas informáticos; consultoría y planes de gestión; e inversiones en producción de biocarburantes y energías renovables.

Las ayudas que presta el ente público suponen un mínimo del 50% de cada proyecto presentado por un beneficiario individual. El porcentaje se puede incrementar un 20% más para grupos excepcionales, tales como jóvenes agricultores y ganaderos o en zonas desfavorecidas de la geografía andaluza, sin llegar a superar en ningún caso el 90% de la inversión total. La resolución, informa la Consejería de Agricultura, está dividida en tres líneas de ayudas: para explotaciones a nivel genérico, una línea específica destinada al olivar y una tercera para la Iniciativa Territorial Integrada (ITI) de la provincia de Cádiz.

Las obligaciones incluidas para los productores en la convocatoria contemplan mantener las inversiones durante al menos cinco años desde la concesión de la ayuda, que sean ejecutadas en nueve meses, así como estar al corriente de las obligaciones fiscales contraídas en la gestión de estas explotaciones.

Además de Almería, cuya intensidad de ayudas ha requerido más dedicación que en el resto de inversiones provinciales, en la distribución provincial global destacan las provincias de Jaén, con 438 solicitudes aprobadas y 17 millones de euros concedidos, fundamentalmente en el sector del olivar, y Córdoba, con 421 beneficiarios y 17,5 millones.