La Federación de Industria y Trabajadores Agrarios (FITAG) de UGT-Almería ha apelado este jueves al diálogo entre Cajamar y la comercializadora agrícola Agrupaejido para evitar un concurso de acreedores y ha advertido de que, en caso de que no se alcance un acuerdo, estarían “en riesgo unos 600 puestos de trabajo”.
El sindicato ha solicitado una reunión “urgente” con la dirección de la alhóndiga y presencia del comité de empresa, con sede principal en La Mojonera, con el objetivo de obtener “una información real y detallada” de lo que está ocurriendo ya que a la “mayoría de la plantilla se le adeuda la última nómina de la campaña de primavera verano”.
“A día de hoy el comité no ha recibido ningún tipo de información y son muchas las presiones que está recibiendo por parte de los trabajadores y trabajadoras que quieren conocer qué va a pasar con sus puestos de trabajo ya que nadie asegura el cobro de la nómina”, ha lamentado.
Ante esta situación, los representantes sindicales han abogado por el entendimiento entre empresa y entidad financiera Cajamar “para no llegar al temido concurso de acreedores” y han trasladado que ponen los servicios jurídicos de UGT a disposición de los todos los trabajadores y del comité de empresa “ante la nefasta situación”.
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