“Cuando en junio estén en el BOE las licitaciones, el AVE será imparable”

De su primera visita hace un año a la cuarta y más reciente, esta misma semana, han mediado importantes avances en el proyecto del AVE a Murcia y, sobre todo, un cambio de percepción de una parte de la sociedad almeriense. Un cambio, hacia la confianza, en el que el ministro empeñó su palabra.

¿El proyecto del AVE en Almería no tiene vuelta atrás?

Por supuesto que no. 

En esta cuarta visita ha traído muchas cosas en la cartera. 

Bueno, algunas eran conocidas. De otras, sobre todo las que tienen que ver con la integración del puerto y del ferrocarril en Almería, y una vez puesto el acento las prioridades, que eran la alta velocidad y las infraestructuras básicas, es el momento de empezar a tomar decisiones con el máximo consenso posible. 

Partíamos de años de inactividad. ¿En qué momento se dio cuenta de que había que coger el toro por los cuernos? 

Realmente desde el primer momento, pero siendo conscientes de que explicar la situación de los proyectos y, sobre todo, los pasos necesarios para llegar a ver las máquinas trabando no era una cuestión sencilla, que podía llegar a trasladarse una realidad distinta de la factible en el sentido de que se pudieran empezar obras sin tener los proyectos adaptados, sin cumplimiento de la Ley del Sector Ferroviario, sin haber hecho los deberes también en las expropiaciones. En un primer momento hubo quienes trataron de lanzar una realidad completamente distorsionada, culpándonos de un retraso cuando lo que estábamos haciendo era lo contrario, estábamos reactivando una actuación de estas características. Sabíamos que era difícil pero hay que reconocer que la sociedad almeriense nos ayudó mucho. Cuando uno cuenta las cosas tal y como son es duro, pero también era necesario. 

¿Ha sido la crisis la gran culpable o es que no se vendió bien lo que se estaba haciendo?

Efectivamente veníamos de una situación en nuestro país en la que no era sencillo llevar a cabo inversiones porque el objetivo prioritario era salvar al país de la quiebra. La prima de riesgo estaba por encima de los 600, que no había para pagar los servicios básicos, los ayuntamientos muchos de ellos estaban en números rojos, en esa situación hay que centrar los esfuerzos en tratar de recuperar la economía, y, superado ese momento, estamos entrando en otro escenario en que ya se pueden acometer actuaciones como las que estamos contemplando en Almería. 

Aquí siempre ha existido la percepción de que esta no era provincia prioritaria para el Gobierno de Madrid. ¿Esto ha cambiado?

Estoy seguro de que esto nunca ha sido así, que siempre se ha considerado Almería como una gran provincia, y, desde luego, haciendo todo el esfuerzo que se podía hacer. Puedo añadir que Almería es una provincia con atención preferente, y el presidente Mariano Rajoy tiene un gran cariño a esta tierra y está muy involucrado en todos los proyectos que estamos poniendo en marcha. 

Hoy por hoy, ¿está en condiciones de garantizar que la fecha que anunció para la llegada del AVE, 2023, se va a cumplir?

Estamos en condiciones de garantizar que vamos a cumplir con la finalización de todo el Corredor en esa fecha. 

¿Se podría malograr en caso, por ejemplo, de un adelanto electoral y/o de cambio de Gobierno?

Sinceramente, creo que no, todo está ya programado, y en el momento en que superemos este mes de junio, con todas las licitaciones en el Boletín, estaremos en una fase imparable, en lo que a ejecución de obra se refiere. Estoy convencido de que esto no tiene ya retorno. Están puestos todos los mimbres para que toda la maquinaria de ejecución de obras de Alta Velocidad se ponga en marcha sin parar. 

Sostiene que la financiación del AVE está garantizada, ¿cómo lo está?

Esta garantizada porque ADIF Alta Velocidad tiene sus propios recursos, su propia capacidad de financiación, su propio sistema de endeudamiento, ajeno lo que es el capítulo 6 de inversiones del Gobierno, y tiene por lo tanto capacidad sobrada para atender a esos compromisos. 

Insisto sobre la financiación. En los nuevos Presupuestos Generales del Estado no aparecerán grandes partidas, y ya sabe que cuando eso ocurre, saltan alarmas. 

Bueno, pero lo que aparecerá en los Presupuestos será en el capítulo 8 las partidas para atender los compromisos de El Puche, al ser una obra que forma parte de los acuerdos del Consejo de Administración de la Sociedad de Integración, y unas partidas poco significativas en el año 2018 para la Alta Velocidad, porque, como ya he explicado, nos situaremos al final de todo el proceso administrativo justo a final del año. Por lo tanto no es posible invertir dinero este año, ni es conveniente consignarlo si no se va a poder invertir. Este es un año en el que todavía necesitamos seguir dando pasos administrativos tan importantes como la licitación de las obras y todo el trámite hasta que se adjudica de forma definitiva. La voluntad es que de todos los tramos algunos puedan empezar ya las obras a finales de año, pero en ningún caso sería con partidas relevantes. 

Ha planteado en esta visita cuestiones como la llegada del ferrocarril en el puerto, que estaba llena de interrogantes, ¿no era oportuno abordarlo antes?

Bueno, se planteó antes la primera fase, porque lo que estamos hablando es continuación d el soterramiento de El Puche, que era la prioridad, y que ya está en marcha. Y eso era lo que teníamos que atender de forma preferente. Ahora estamos ya en condiciones de poder cerrar un acuerdo sobre el diseño y tiene que haber una máxima integración de lo que es el soterramiento del ferrocarril en el puerto con la decisión que se tome en relación a las estaciones para coordinarlo al máximo. Es importante que en este mismo mes de abril se pueda llegar a cerrar un acuerdo. Nuestro compromiso es que, inmediatamente se cierre ese acuerdo, caminar en los dos sentidos con la máxima intensidad. Por un lado, la licitación del estudio informativo para la integración. Por otro lado, en la actualización del estudio informativo, contemplando la solución para el puerto que integre ese ferrocarril. 

O sea, definitivamente, llegada del tren al puerto, sí. 

Creo que es un proyecto que tiene que acometerse, e indudablemente estamos en el momento oportuno, en el que hay que tomar ya una decisión en torno a la estación, y en el que además va a haber unas obras de soterramiento, como las de El Puche, que, al final, influyen en la decisión del conjunto. 

¿Que no se conectaran el tren y el puerto sería malo para esta ciudad y esta provincia?

Yo creo que encaja perfectamente con los objetivos que marcamos dentro del programa de accesibilidad marítimo-terrestre, tiene todo el sentido del mundo que se produzca una conexión con la zona portuaria, tal y como viene sucediendo en otros puertos, y tiene todo el sentido del mundo que hagamos un esfuerzo para que no suponga una barrera con la ciudad. Ambas cosas son razonables, y por eso creo que hay que ir a una solución soterrada suficientemente eficiente como para tratar de acotar la magnitud de la actuación, entendiendo, por los primeros números que tenemos, que ya es sustancialmente superior a lo planteado de forma inicial. Estamos ya por el doble de lo que podría considerarse anteriormente. 

Además del AVE a Murcia, la mejora de la conexión ferroviaria con Madrid por Granada también es una reivindicación que viene de lejos. ¿Tiene ya la respuesta para eso?

Hemos aprobado el día 22 el proyecto del cambiador de Granada, que vamos a licitar en el mes de abril, el plazo de ejecución son 10 meses, con lo cual, si lo licitamos en el abril, podemos tenerlo adjudicado a lo largo del verano, pensando en que esté instalado ya en el comienzo del verano del año que viene, con una inversión de unos 6 millones de euros. 

¿Almería empieza a tener salidas ferroviarias?

Almería no solo tiene salidas sino que va a tener un futuro muy prometedor, porque las infraestructuras que se están poniendo en marcha, y eso se sabe en los lugares a los que finalmente ha llegado el AVE, son de las que cambian provincias, cambian las regiones, y cambian incluso hasta la forma de convivir, en muchos casos. Almería tiene por delante un futuro muy esperanzador.