Reglas de seguridad para las compras por internet

El fuerte avance que se está produciendo en las compras que los almerienses, como el resto de ciudadanos españoles, realizan a distancia, en la mayor parte de los casos a través de Internet, disponen de su propia regulación, aunque con frecuencia esas reglas del juego no son bien conocidas por los usuarios de este tipo de prácticas comerciales.

Por eso la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ha emprendido una actividad informativa para recordarle a los consumidores sus derechos a la hora de comprar a través de las redes o webs comerciales.

Una de las recomendaciones que incluye es recordando a los compradores que, con carácter general, los establecimientos comerciales no están obligados a aceptar la devolución de los productos adquiridos, con algunas excepciones. Una de ellas es precisamente la adquisición de productos a distancia, como es el caso de las ventas online o el comercio electrónico, que se rigen por normas en algunos aspectos diferentes a las del comercio tradicional.

Desistimiento
En esos casos de ventas a distancia los consumidores disponen del llamado “derecho de desistimiento”, por el cual pueden devolver los artículos adquiridos en un plazo de 14 días, sin tener que dar ninguna explicación y sin que se les puedan aplicar penalizaciones por parte de los vendedores.

Hay que tener en cuenta que el plazo para el desistimiento se cuenta en días naturales, incluyendo por tanto los domingos, festivos y días inhábiles, a partir de la celebración de la firma o transacción, si se trata de un contrato de servicios (gas, electricidad, agua o telecomunicaciones, entre otras, o desde el día en que la persona consumidora y/o usuaria adquiera la posesión material del producto solicitado (si se trata de un contrato de venta).

Otro de los casos en que los consumidores pueden devolver los artículos adquiridos, sin penalización, es cuando se encuentran ante un producto con algún tipo de defecto o tara. En ese supuesto el establecimiento no podrá negarse al cambio de producto por otro de iguales o similares características, o la devolución del importe pagado.

En el caso de compras presenciales, los compradores podrán devolver sus compras si así lo establece el establecimiento en sus ventas, pero en ese caso de forma voluntaria.