La vieja grúa amarilla del Puerto recobra su esplendor

Más de 50 años a la intemperie pasan factura. Bien lo sabe la vieja grúa amarilla del Puerto de Almería, que, tras más de medio siglo configurando el paisaje portuario de la capital, ahora se está viendo sometida a una particular operación de estética para darle mayor seguridad y esplendor a uno de los elementos más característicos de la zona portuaria.

Así lo ha anunciado la Autoridad Portuaria de Almería, que ha explicado que ya se han iniciado los trabajos de refuerzo de la estructura de la vieja grúa amarilla ubicada en el arranque del Muelle de Levante del Puerto de la capital. Se trata de la única grúa de mediados de los años cincuenta del siglo pasado que se conserva en el recinto portuario.

La empresa Evintes Calidad ha comenzado las obras para asegurar la estructura, obras que incluyen el refuerzo de nudos y perfiles que sufren oxidación severa, así como el refuerzo y nuevos anclajes de la base y de la estructura, con la colocación de vigas metálicas. Asimismo, se realizará el macizado con hormigón de los apoyos de la estructura metálica.

Diagnóstico

El refuerzo de la vieja grúa se ha decidido tras el diagnóstico emitido por los técnicos, que dentro del plan de inspección periódico de estructuras de la Autoridad Portuaria, han realizado recientemente un examen exhaustivo de su estado. El objetivo es asegurar la estructura para consolidarla y garantizar su pervivencia.

La grúa, con sus veinte metros de altura y su color amarillo intenso, es una de las estructuras del Puerto de los años sesenta que aún perduran y cuya imagen recuerda cómo era la actividad portuaria de mediados del siglo pasado. Entre sus elementos, destacan su cabina de madera, la pluma y la base con perfiles metálicos y uniones formadas por remaches. Con capacidad para levantar una carga máxima de 25 toneladas, fue fabricada por la Sociedad Española de Construcciones Babcock & Wilcox, en los talleres de Galindo, en Vizcaya.