El Ayuntamiento busca fórmulas para el alquiler de bicis y patinetes

Rondaba el año 2017 cuando llegaba al Ayuntamiento de la capital la idea de poner en marcha un servicio de alquiler de bicicletas y se abogaba por el sistema de concesión administrativa para convertirse en realidad. Desde entonces esta intención siempre ha estado encima de la mesa y dentro de los programas electorales de los populares como una de sus medidas fuertes de cara al fomento de la movilidad sostenible. Tanto es así que la última vez que se daba por hecho su puesta en marcha fue en marzo de este mismo año cuando se hablaba de incluir dentro de la misma los patinetes eléctricos y, si me apuran, hasta hoy mismo por boca de la concejal de Movilidad, María del Mar García Lorca, quien explicaba que la salida de la misma se estaba retrasando porque “no se recomienda el uso de elementos movilidad compartida por temas de higiene" y por tanto "ahora no parece el momento más adecuado para sacarlo, pero todo sigue su curso y se está trabajando en ello”.

Tras una pregunta sobre los plazos que puede tener la aprobación de una concesión así, era la portavoz del equipo de Gobierno, María del Mar Vázquez, la que tomaba la palabra para afirmar que hay que ver las opciones para poner en marcha este sistema de alquiler de bicicletas y patinetes porque "en todos sitios donde hay una concesión administrativa de este tipo es deficitaria" y por tanto, antes de su puesta en marcha hay que analizar si es productivo o no, así como ver las opciones que hay más allá de la propia concesión como tal.

Estos problemas económicos son los que llevan retrasando durante los últimos tiempos la salida a concurso de una concesión administrativa en la que siempre se ha estado trabajando y que incluso se pensó en ampliar ámbito para incluir patinetes. 

Era mayo de 2017 cuando el alcalde de la capital, Ramón Fernández-Pacheco, y la entonces concejal de Movilidad, Rafaela Abad, presentaban públicamente la memoria del servicio de alquiler de bicicletas que había diseñado el Ayuntamiento de Almería para mejorar la movilidad en la ciudad y, sobre todo, sacarle partido a la importante inversión que desde la Junta de Andalucía y el propio Consistorio se había realizado en la creación de carriles bici.

Pretendía el regidor que se pusiera en marcha a finales de 2017 o comienzos de 2018 y ahora parece que ya no interesa tanto. Desde entonces se han dado pasos administrativos que van desde la aprobación del correspondiente Reglamento Regulador del Servicio Municipal de Alquiler de Bicicletas de Almería (SMAB) allá por octubre de 2017 y ya en febrero de 2018 se aprobaban los precios públicos. Se llegaron a elaborar unos pliegos de condiciones siendo ya concejal de Movilidad, Manuel Guzmán, que fueron rechazados por el interventor a causa de la llegada de la nueva Ley de Contratos. Era febrero de 2019.

Desde entonces siempre se ha mantenido que habría concesión pero sin avanzar, al menos externamente, ni un ápice para que fuera una realidad.