Balística descarta el rebote en la muerte del legionario Jiménez

El juicio celebrado en Sevilla apunta a un disparo directo del sargento durante un ejercicio

El legionario Alejandro Jiménez
El legionario Alejandro Jiménez La Voz
Europa Press
18:57 • 22 feb. 2023

El Tribunal Territorial Militar Segundo, con sede en Sevilla, continuó este miércoles el juicio por la muerte por un disparo de fusil de un legionario Alejandro Jiménez de 21 años durante un ejercicio de la Brigada Rey Alfonso XIII desarrollado en marzo de 2019 en Agost (Alicante), procedimiento que se dirige contra ocho militares, si bien el Ministerio Publico acusa tan solo a dos tenientes, un capitán y un sargento.




Tras el comienzo del juicio la semana pasada, con la comparecencia del sargento de la Brigada de la Legión S. A., a quien el Ministerio Público atribuye la autoría del disparo mortal, reclamando para él siete años, cinco meses y 15 días de prisión, la sesión de este miércoles contó con la comparecencia de cinco miembros de la Policía Científica de la Guardia Civil, todos ellos procedentes de Madrid, quienes según han informado fuentes del caso, confirmaron los informes de dicho departamento según los cuales el proyectil que mató al soldado fallecido procedía del fusil del sargento inculpado.




Mediante aspectos de trayectoria, distancia o componentes químicos, entre otros elementos, estos miembros de la Policía Científica han confirmado, a todos los efectos, las conclusiones alcanzadas respecto a que el proyectil que alcanzó al efectivo fallecido procedía del fusil que usaba el sargento de la Brigada de la Legión S. A., descartando además la posibilidad de que el impacto mortal de bala derivase de un “rebote” de un proyectil, planteamiento esgrimido por el principal inculpado en esta causa.




En ese sentido, recordemos que todo aconteció en unas maniobras desarrolladas el 25 de marzo de 2019 en el campo de tiro de Agost, donde el pelotón que comandaba el sargento de la Brigada de la Legión S. A. acometió un ejercicio de asalto a un merlón con cuatro blancos.




Según la Fiscalía, tras culminar el ejercicio programado, el sargento gritó “enemigo al frente, al faldón de la montaña, en claro blanco a las doce, sin que dicha orden estuviese prevista previamente en la programación del ejercicio”.






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