El pasado miércoles cientos de clientes de Redexis, compañía de infraestructuras energéticas, estuvieron durante horas sin poder hacer uso del gas natural debido a la rotura de una de las tuberías principales de la ciudad, que fue "pinchada" durante las obras del soterramiento a la altura de las viejas casas de la Renfe. Esta incidencia no solamente afectó a viviendas particulares, también a decenas de hosteleros de toda la capital que no esconden su enfadado por las horas de "desinformación" y la repercusión negativa que tuvo para sus negocios, por lo que muchos se plantean hacer a nivel particular una reclamación exigiendo responsabilidades.
"Llamabas a atención al cliente y no daban información, decían que no sabían nada. Eso es lo que cabrea a los hosteleros, esa desinformación provoca desesperación. No sabes si es algún fallo de la instalación o que te hayas podido despistar y que no hayas pagado una factura. Pasamos horas sin saber qué pasaba hasta que nos enteramos por una noticia de La Voz de Almería que había sido un incidente en las obras del soterramiento", explica Pedro Sánchez-Fortún, hostelero y presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Almería (ASHAL).
Detalla que "fue un día de mucha incertidumbre, porque no puedes atender al cliente y muchos tuvieron incluso que cerrar el negocio ese día porque no hay un 'plan b' si hasta las freidoras van con gas natural" y avisa que, tras recoger las impresiones de otros compañeros del gremio durante estos últimos días, "hay cerca de una veintena de establecimientos que están pensando poner una reclamación, a nivel particular. Está claro que, aunque haya sido un accidente, alguien tiene que responsabilizarse, no siempre tenemos que pagar los mismos. Afectó a cafeterías, bares y restaurantes, que tuvieron pérdidas sustanciosas".
Pérdidas con las reservas
Y es que la incidencia con el gas natural no solamente frenó el servicio en dichos establecimientos y les impidió facturar, muchos tuvieron incluso un detrimento económico. "Cuando no tienes reservas trabajas con lo que entre durante el día, pero si por ejemplo tienes prevista una mesa reservada para 40 personas y no puedes dar el servicio porque no se puede elaborar la comida, ahí hay un daño importante porque tenías ya el producto comprado para ello y puedes perderlo. En este caso sí puedes cuantificar ese perjuicio", informa.
El presidente de los hosteleros almerienses argumenta que, pese a estar valorándolo, "en principio, al tener cada negocio de restauración distintas pérdidas y sus propios seguros, desde ASHAL no se va a hacer una reclamación colectiva, cada negocio lo hará con los números que tenga en sus manos, haciendo también una media de lo que se ganó el día de antes a este incidente y el de después".
El incidente tuvo lugar alrededor de las 9:00 horas de la mañana del pasado día 12 de junio, durante "un movimiento de tierras" relacionado con las obras del soterramiento en calle Ferrobús, labores que realiza Sacyr para Adif. Fuentes de la compañía de infraestructuras energéticas explicaba a LA VOZ que "se pinchó" una de las tuberías "principales" de la ciudad, lo que provocó el corte del suministro en prácticamente toda la ciudad de Almería, donde Redexis cuenta con unos 7.000 clientes que se vieron afectados.
La mayor parte de bares y restaurantes almerienses cuentan con hornillas a gas natural, lo que les impidió poder ofrecer con normalidad el servicio durante este mediodía. Una de las zonas más afectadas fue el barrio de El Zapillo, donde el suministro se fue restituyendo a partir de las 17:00 horas, más tarde que en lugares como el centro de la ciudad, donde algunos negocios ya volvían a recuperarlo a las 14:00 horas.
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