Cruz Roja atiende a más de 2.000 personas en situación de calle en Almería

La Unidad de Emergencia Social (UES) de Cruz Roja Española en Almería ha reforzado sus capacidades tanto materiales como de personal voluntario para atender a personas en situación de calle y extrema vulnerabilidad. Según los últimos datos registrados Cruz Roja está atendiendo en la provincia de Almería a más de 2.240 personas en situación de sinhogarismo.

En sus rutas prestablecidas, en su mayoría nocturnas, el voluntariado de UES ofrece a las personas en situación de sin hogar bebidas calientes, mantas, sacos de dormir, ropa de abrigo, productos de higiene personal, información de recursos temporales donde alojarse para evitar el frío, y también conversación y escucha, acciones estas en los equipos tratan de detectar otras posibles necesidades o problemas de salud que requieran atención lo antes posible, como sufrir algún tipo de violencia o padecer alguna enfermedad respiratoria, dermatológica o de otra índole que pudieran acentuarse por las bajas temperaturas.

Además de la atención nocturna que dispensan a las personas en sinhogarismo, Cruz Roja les ofrece el Centro de Atención Social, CASA, para que puedan permanecer durante el día así como servicios de duchas, lavandería y asesoramiento en apoyo para cualquier gestión, acompañamiento o ayuda en procesos de reinserción.

Consejos ante el frío

Las bajas temperaturas pueden desencadenar serios problemas de salud, con mayores consecuencias sobre algunos colectivos concretos: de ahí la importancia de conocer las medidas de prevención y actuación en estos casos para mejorar la calidad de vida. 

Por eso, cada año, entre los meses de diciembre y febrero, Cruz Roja desarrolla la campaña de información y sensibilización para la promoción de hábitos saludables básicos que contribuyen a evitar o reducir el impacto negativo del frío extremo en nuestra salud. La campaña se dirige a la población general y, especialmente, a aquellas personas más vulnerables a las temperaturas bajas. 

En primer lugar, el frío no afecta a todas las personas por igual, hay ciertos colectivos que son más vulnerables entre los que se encuentran personas con movilidad reducida, personas que trabajan al aire libre, personas mayores, personas con bajo peso, niños y bebés, mujeres embarazadas, personas con enfermedades crónicas y también personas con adicción al alcohol. 

Si no se consigue la temperatura corporal, el frío puede derivar en una hipotermia. Si la hipotermia es leve, la piel se verá enrojecida, se sentirán escalofríos y temblores, el pulso y la respiración se acelerarán, generará una sensación de fatiga y somnolencia, se podrán tener dificultades para hablar y aumentará torpeza. En este caso, se debe buscar un lugar seco y cálido, abrigarse con mantas y es recomendable ingerir líquidos calientes sin alcohol ni cafeína. 

Si por el contrario la hipotermia es grave, la temperatura corporal será muy baja, la piel se verá pálida o azulada y estaría fría, el pulso y la respiración disminuirán. La confusión, pérdida de memoria o inconsciencia también forman parte de los síntomas, así como también la rigidez muscular y pérdida de coordinación. En esta situación se debe buscar ayuda médica, en volver a la persona afectada con mantas y mantenerla en posición horizontal. Se debe evitar aplicar el calor directo como baños y duchas calientes. 

En cualquier caso, para estar en guardia ante el frío el cuerpo debe mantenerse caliente e hidratado. Para ello, es recomendable beber líquidos calientes como infusiones, caldos y sopas, así como también la ingesta de alimentos ricos en calorías y nutrientes como guisos, legumbres y frutos secos, que ayudan a mantener el calor corporal.