A día de hoy, tal como está montada la industria agroalimentaria almeriense, si el sector del transporte por carretera tose, el invernadero se resfría. Y en los últimos meses hay motivos para más que estornudar: las empresas de camiones cada vez tienen más dificultades para encontrar chóferes para cubrir las rutas de las exportaciones hortofrutícolas a Europa.
No es un problema nuevo ni exclusivo de Almería, pero la demanda de profesionales del volante se ha ido acrecentando en las últimas semanas, en algunos casos de forma dramática para algunas empresas. Una de las principales firmas de transporte de España, la almeriense J. Carrión con sede en Huércal de Almería, ha abierto una oferta de empleo urgente para 50 chóferes con sede en Huelva para exportar fresa y otros productos hortofrutícolas.
Desde la delegación en Almería de la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer), Yolanda Aguilar confirma que “el problema es grave en toda Europa y en Almería también con mayor motivo, hacemos un llamamiento para que se facilite el acceso a esta profesión”.
Almería sufre aún más que otras zonas de España la falta de conductores profesionales porque la industria agroalimentaria depende en un 95% del transporte por carretera para exportar las hortalizas de primor. Con 8.000 cabezas tractoras es la primera flota de España en términos relativos a su población y la tercera después de Madrid y Barcelona en términos absolutos.
De alhóndigas y cooperativas de Pulpí, Níjar, El Ejido, Roquetas, Vícar o La Mojonera parten casi 2.000 camiones diarios que suponen anualmente 2,3 millones de toneladas de alimentos de la huerta almeriense que rentan más de 2.000 millones de euros para el PIB almeriense. Almería cuenta con 3.500 empresas de transporte por carretera y sumaba, hasta que ha empezado caer el castillo de naipes, una nómina de 10.000 conductores.
Juan Cano, presidente de J. Cano, una de las primeras empresas de Andalucía con sede en Antas con 500 chóferes contratados considera que “esta falta de conductores es consecuencia de que el carnet cuesta ya casi 6.000 euros, cuando antes solo había que pagar 80 euros de tasas, por eso las autoescuelas están vacías, cada vez hay más requisitos y obligan a que estén 45 horas estacionados en un área de servicio".
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