Saboreando Almería a través de su gastronomía

El turismo gastronómico ya se considera un componente vital de la experiencia turística, dado que permite al visitante conocer la cultura local al degustar los platos tradicionales de un lugar, reflejo de su historia, y las materias primas de la zona. Almería es mar y huerta. Almería es tradición e innovación. Almería es capital de la tapa. Almería es creatividad y cocina de mercado. Almería es cultura gastronómica y en los fogones de los almerienses cobran vida recetas tradicionales heredadas de generación en generación, que permiten que su gastronomía se mantenga intacta desde hace siglos pudiendo ser degustada aún hoy.

Recetas sencillas, económicas y con especial apego a la tradición, que se saborean en los hogares y en las mesas de restaurantes de reconocido prestigio cuyos chefs, abanderan: la agricultura, pesca, ganadería, aceites, vinos y así un largo etcétera de joyas gastronómicas que atesora Almería. Sabores que merecen sentirse en el paladar para apreciar la influencia de provincias vecinas como Granada, Málaga e incluso Murcia y, en general, de toda el área mediterránea.

Almería es conocida como la Huerta de Europa y es que en sus tierras fértiles se cultivan los mejores productos agrícolas que alimentan a comensales de muy diversos rincones del planeta, pero además de ser característicamente agrícola su área costera también tiene un gran protagonismo en una cocina estrechamente vinculada a la huerta y a los productos de mar, protagonistas en sus platos. Para conocer Almería hay que sentarse a la mesa y disfrutar de sus platos.

Los gurullos, ajopollo, migas, chérigan, ajo colorao, patatas a lo pobre o gazpacho son solo algunos de los platos típicos almerienses que mantienen el calor de los fogones de nuestros ancestros haciendo las delicias de turistas y autóctonos enamorados de su gastronomía, que atrae por sus paisajes y conquista por el estómago gracias a su cocina.