Agosto llega con un respiro en la ola de calor que ha sufrido la provincia

Las previsiones meteorológicas apuntan a un descenso de las temperaturas que pondrán fin a los tres días de calor abrasador que se han vivido en la transición entre el mes de julio y el de agosto, unos días en los que se han superado incluso los cuarenta grados en algunas zonas de la provincia.

A partir del mediodía de ayer lunes el descenso ha sido notorio en la capital y en la comarca del Poniente. Es el punto y final a una ola de calor que ha sido evidente tanto durante el día como por las noches, cuando los termómetros han superado el ‘umbral del sueño’ es decir mínimas por encima de los 26 o 27 grados.

Un respiro
Los valores a partir de hoy, que ya fueron sansiblemente inferiores durante la tarde de ayer, llevarán las temperaturas a valores similares a los de principios de la semana pasada, es decir rondando los 32 o 33 grados en la capital, sobre los 33 a 34 grados en el Poniente, y valores similares en la mayor parte del Levante.

Los servicios de Meteorología indican además que podrían aparecer algunas nubes matinales en los dos o tres próximos días, aunque con escasas posibilidades de que dejen precipitaciones. Existe una posibilidad de que el miércoles o el jueves pudieran aparecer nubes procedentes del sur, a medida que el levante vaya rolando a componente sur. Es el clásico polvo africano, que podría dar origen a esa lluvia seca de tierra roja que de cuando en cuando alcanza la provincia. Sin embargo, se trata de una posibilidad remota.

La tendencia para el resto de la semana es estable, lo que permite suponer que aunque hará calor (“no hay que olvidar que estamos en plena temporada de verano, lo que significa que hace calor”, indica Eduardo Romay, experto en el clima almeriense) este no será tan sofocante como en estos últimos días. Hoy martes las temperaturas estarán por encima de los treinta grados, aunque en valores que no deberían traspasar la barrera de los 35. Picos commo los vividos en el Valle del Andarax, con 43 grados en Instinción o 42 en Canjáyar, será difícil que se repitan.