El denso tráfico de camiones provoca que la calidad del aire sea mala en el Poniente

Los cientos de camiones que, a diario, circulan por las carreteras de la comarca del Poniente, que cuenta con la mayor concentración de tráfico pesado de todo el sureste español, provocan emisiones de óxido de nitrógeno y dióxido de carbono que provocan que la calidad del aire no sea buena.

La última medición realizada por la consejería de Medio Ambiente la califica solo de “admisible”, en un baremo que va desde “buena” a “muy mala”, aunque los valores están dentro de los mínimos regulados, según ha explicado en SER Poniente el delegado provincial de Medio Ambiente, Antonio Martínez. La estimación es que los datos vayan a peor, aunque desde la Junta se aclara que no se trata de una predicción, sino de una comparativa que se hace con el día anterior: si lo valores no mejoran, se considera que los índices empeoran al día siguiente, sobre todo en los niveles de ozono troposférico, que son los que, actualmente, están más elevados. 

La red más extensa

Por su parte, los ecologistas explican que la mala calidad del aire del Poniente está relacionada con la actividad agrícola. Porque no es solo el intensísimo tráfico de camiones, que circulan con gasoil y lanzan a la atmósfera elevadas concentraciones de partículas contaminantes, sino también -y este es un problema menos perceptible- es que el tráfico se genera, en muchos casos, en caminos de tierra, lo que provoca índices considerables de partículas en suspensión, también denominado polvo atmosférico. 

El Ejido cuenta con la red viaria más densa de Andalucía, con 265 kilómetros de caminos asfaltados y 350 kilómetros de caminos de tierra; unos datos que ponen de manifiesto la magnitud de un municipio que representa la mayor superficie invernada de toda la provincia. Además, el 70 % de la comercialización se realiza en empresas radicadas también aquí, lo que da idea del tráfico incesante de estas vías.

Afecta a los cultivos

El polvo atmosférico puede afectar a los cultivos al aire libre, ya que se deposita en las hojas de las plantas e impide su correcta fotosíntesis. Un caso similar ocurrió en Gádor, con naranjos que se vieron afectados por las partículas en suspensión procedentes de la planta de Holcim. “El problema existe, hay miles de camiones diarios con motores muy potentes que generan una contaminación muy importante”, explica Antonio Fernández, vicepresidente del Grupo Ecologista Mediterráneo (GEM).

De ahí, que desde el GEM se defienda la puesta en marcha de un tren de mercancías, una infraestructura que permitiría agrupar en un solo transporte el de miles de vehículos. “Con un tren, se podrían sacar 400 contenedores, que es el equivalente a  400 camiones. Esto iría en la línea de las directrices marcadas por Bruselas, que habla de potenciar el transporte marítimo y ferroviario, pero en Almería no disponemos de infraestructuras, ni a nivel ferroviario ni tampoco marítimo”, critica.