El Jardín Botánico ’La Almunya del Sur’ se une a la oferta del sector turístico en El Ejido

El Ejido sigue dando pasos para romper la estacionalidad turística con la diversificación de la oferta. Entre ellos, está el apoyo al proyecto de Jardín Botánico 'La Almunya del Sur' que, desde hace escasamente un año, está funcionando en el municipio. Se trata de una explotación agrícola de estilo andalusí que dos jóvenes emprendedores ejidenses, Manuel Sánchez y Carlos Collado, han puesto en marcha en una antigua finca de frutales por cuyas instalaciones ha realizado una visita recientemente el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora. El jardín alberga en la actualidad más de un millar de variedades de plantas procedentes de los cinco continentes entre estanques, albercas, acequias y senderos a lo largo de sus 2.500 metros cuadrados de extensión.

Entre las especies que crecen y se cultivan en él, destacan plantas tan poco comunes como el cedro Himalaya, macasar, plantas autóctonas protegidas, árboles frutales, plantas aromáticas o las exóticas como palmáceas, bambúes, cactáceas y suculentas. Asimismo, hay un espacio dedicado a las hortalizas más tradicionales de cualquier huerto como son las habas, guisantes, calabazas, lechugas o coles.

Sin duda, un verdadero oasis por el que Góngora ha querido “felicitar a estos emprendedores”, ya que han puesto en marcha un proyecto que “está generando nuevas posibilidades de ocio y empleo a la ciudad y que, sobre todo, ayuda a ganar en diversidad al sector turístico al que complementan con su oferta de naturaleza y las visitas guiadas que vienen organizando por las instalaciones de este jardín”. "Estamos ante un reclamo más de cara a este sector turístico cada vez más exigente que busca para sus días de vacaciones destinos donde pueda descansar todo el año y con una oferta amplia y variada”, ha señalado Francisco Góngora en su visita a las instalaciones. 

Tras el recorrido por los distintos senderos, entre limoneros, nísperos, ciruelos,  membrilleros, lavanda o cañas de azúcar, el regidor ha destacado “el valor medioambiental y turístico que tiene este proyecto, no sólo por la gran variedad de plantas existentes y la belleza de sus rincones, sino por el ecosistema que han conseguido favorecer e incluso mantener en equilibrio gracias a las técnicas de sostenibilidad que están aplicando en el proceso de mantenimiento de este jardín con la máxima optimización de los recursos hídricos o el aprovechamiento de los restos de poda para el abonado y nutrientes del suelo”.

El jardín ha tenido también un efecto secundario con la llegada de insectos, anfibios o distintas especies de mariposas que están siendo, hoy por hoy, objeto de estudio por parte de investigadores en esta materia. En el espacio, se realizan talleres medioambientales, de jardinería o agrícolas que está llevando a cabo la asociación vinculada al jardín, 'Amigos de la Almunya del Sur'.