El viejo Mercado de Abastos luce su nueva imagen tras una inversión de 150.000 euros

Los comerciantes que han apostado por abrir un nuevo negocio dentro de las instalaciones del nuevo Mercado de Abastos de Macael ya cuentan los días para que esa nueva etapa dé comienzo. También lo hacen sus vecinos, que tendrán un nuevo lugar donde realizar sus compras diarias, con las ventajas de una nueva instalación pero con una familiaridad que recordará a los mercados de antaño.

Antes de finalizar una rehabilitación que ha requerido una inversión de 150.000 euros aproximadamente, el Ayuntamiento dio el paso de sacar a concurso los ocho locales que componen el Mercado de Abastos y ahora es el momento de una apertura de puertas prevista para finales de este mes de febrero. Antes hay que solucionar los últimos trámites relacionados con el suministro de energía a los diferentes puestos. Es el último paso a dar.

Un puesto libre
Cuando esta instalación dé el pistoletazo de salida, serán siete los establecimientos abiertos, ya que uno de los interesados ha renunciado a ocupar uno de los lugares destinados a comerciantes y emprendedores. Así, el Ayuntamiento prevé que el local libre sea ocupado en próximas fechas.

Las condiciones para los que han decidido optar a uno de estos espacios no pueden ser más ventajosas. Deben pagar un alquiler mensual de 30 euros y afrontar sólo los costes de la luz y el agua.La andadura de esta nueva Plaza de Abastos estará protagonizada por puestos destinados a la venta de productos que tradicionalmente han ocupado este tipo de mercados.

Así, se está preparando la apertura de una cafetería, un puesto de salazones y encurtidos, una pescadería, una carnicería y puesto de comida para llevar. Actividades que tradicionalmente se han encontrado en este tipo de recintos y que, en el caso de Macael, se volverán a encontrar a partir de este mismo mes.

Puesta en valor
Sobre el objetivo de la rehabilitación, el alcalde de Macael, Raúl Martínez, explica que “se pretendía poner en valor un edificio abandonado, volviendo a reactivar parte de la zona comercial del municipio”, además de “fomentar el autoempleo de estas personas que no tenían una actividad laboral”.

En cuanto al diseño, Martínez subraya que la intención era “darle un aire actual con todos nuestros mármoles y un diseño desenfadado, atractivo y llamativo a la vista” y reconoce que el Gobierno local tiene “muchas esperanzas” en este nuevo proyecto.