Si algo caracteriza al núcleo ejidense de La Aldeílla es la capacidad de sus vecinos para ir “todos a una” en cuestiones solidarias y más si cabe si se trata de ayudar a niños y mejorar la educación de los mismos.
De ahí surgió la idea de crear un Banco de Libros cuyas donaciones tuviesen como destinatarios menores que pertenecen a familias en riesgo de exclusión. Inés Blasco, coordinadora de los programas de las asociaciones de mujeres en Santa María del Águila, detalla que ante la necesidad de involucrarse en la ayuda humanitaria y buscando donde enrolarse, conocieron el Banco de Libros que promueve Tíjola, su funcionamiento y finalidad. “A través de ese interés encontramos ACOES, una ONG dirigida por el Padre Patricio, que trabaja en Honduras desde hace 20 años y que ofrece una doble garantía, por un lado que solo trabaja con voluntariado, y, por otro, que sabemos que todo el material que se manda llega al destino”, señala Inés.
En ese punto, el colectivo de asociaciones de La Aldeílla se puso en contacto con Tíjola para conocer de primera mano su Banco de Libros que va a parar hasta la capital de Honduras, Tegucigalpa. Allí, el Padre Patricio desarrolla un importante proyecto educativo dirigido a unos 4.000 niños que busca mejorar la educación de los menores que pertenecen a familias desfavorecidas y con pocos recursos, así como suministrar material escolar suficiente para poder cursar el año académico y mejorar las infraestructuras educativos en determinadas zona de la capital.
Colectivo
Un proyecto solidario al que han decidido sumarse un total de ocho asociaciones de Santa María del Águila con la colaboración de la Junta Local: la asociación cultural, de jóvenes, la cofradía, mujeres y las cuatro asociaciones de padres y madres de los centros educativos del núcleo.
Y de este modo, ya han comenzado a sumar una red voluntarios para este martes, 16 de octubre, comenzar con la primera colecta de libros. Para ello, se ha habilitado el Centro Asociativo del núcleo situado en la calle Navarra esquina con calle Valencia para que las personas que quieran donar tengan un espacio donde llevar el material. Sobre este asunto, Inés resalta que se pueden depositar libros que estén siempre en buen estado y óptimas condiciones y cuya temática sea de interés educativo, es decir, estudio, enciclopedias o diccionarios, y de literatura y lectura. Además, Inés recuerda que la colecta también está dirigida a recoger material escolar como lápices, mochilas, bolígrafos, gomas o estuches que también se llevarían hasta el contenedor con destino a Tegucigalpa.
El horario de recogida será todos los martes, miércoles y jueves de 18:00 horas a 20:30 horas.
“El objetivo es hacer varias campañas a lo largo del año, la primera terminará a mediados de diciembre y la segunda a finales de junio, para ir incentivando poco a poco la solidaridad de los ejidenses y de todas las personas que quieran colaborar con esta importante iniciativa”, explica Inés.
En el Centro Asociativo cada tarde estará un grupo de voluntarios que se encargará de recoger, clasificar y empaquetar todo el material para ser guardado y enviado directamente a Tíjola desde donde se introducirá en los contenedores que viajarán hasta Honduras donde los voluntarios del proyecto del Padre Patricio lo distribuirá a las familias que lo necesiten.
Optimistas
Inés se ha mostrado muy positiva ante la respuesta de los vecinos a la hora de donar libros ya que a pesar de que tienen que llenar un contenedor entero donde cabe mucho material, hay personas y entidades que ya han mostrado su predisposición a colaborar con la iniciativa. Este es el caso de los centros educativos del núcleo que ya han realizado algunas donaciones con libros de texto de diferentes materias: ciencia, informática o literatura. Otro vecino, conocedor de la propuesta, ha donado ya una enciclopedia.
De este modo, esperan enviar miles y miles de kilos de libros y de material escolar, que irán directos a Tegucigalpa para niños y niñas que prácticamente no tienen nada, que viven en la más extrema de las pobreza y cuya única posibilidad de aprendizaje reside en estos libros.
Así, con más voluntad que presupuesto, este colectivo formado por las asociaciones de La Aldeílla y cada vez más vecinos, están impulsando estas acciones solidarias, pequeños gestos que se convierten en grandes esperanzas para quienes reciben el afecto, el amor y el calor que viajan a resguardo, dentro de cientos de cajas.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/160553/los-libros-unen-la-aldeilla-y-honduras
Temas relacionados
-
Infraestructuras
-
Libros
-
Literatura
-
Ciencia
-
Cofradías
-
Asociaciones
-
Tíjola
-
Informática y electrónica
-
Vecinos