El castillo de quince torres que presidía Mojácar

Se trata de un tesoro enterrado que reluce con más fuerza conforme se acerca a la superficie. El yacimiento de ‘Mojácar la Vieja’ no ha dejado de sacar a la luz los restos del antiguo emplazamiento de Mojácar, situado en uno de los cerros que se pueden observar desde el mirador de la actual ubicación del pueblo.

Puntas de flecha, un cuchillo, estructuras como numerosas torres, parte de la muralla, dibujos geométricos en paredes de viviendas, la mezquita, vasijas... No ha pasado ni un día de la segunda fase en ‘Mojácar la Vieja’ en el que el equipo de profesionales, estudiantes y voluntarios coordinados por el grupo ‘MemoLab’ de la Universidad de Granada no haya sacado a la luz un nuevo descubrimiento que ayude a explicar el modo de vida de los antiguos mojaqueros y habitantes de la comarca del Levante almeriense entre los siglos XII y XIII. De hecho, que haya sido un yacimiento abierto al público ha ayudado a concienciar a vecinos y visitantes de la envergadura y la relevancia de este patrimonio histórico.

Últimos hallazgos

Todo el cerro es un tesoro con muchos ‘lingotes’ en forma de herencia de la Mojácar musulmana aún por descubrir. Entre los últimos hallazgos, figura la puerta de entrada a la población. Pese a que ya han salido a la luz todos los descubrimientos comentados anteriormente, para el director del proyecto, José María Martín, aún queda mucho por descubrir tras esta segunda fase de excavaciones que se ha desarrollado durante todo el mes de julio.

“Acabamos casi de empezar. Esta ha sido la segunda campaña de un mes osea que en realidad llevamos dos meses excavando aunque hay cundido mucho el trabajo pero es un yacimiento con unas dimensiones considerables y con mucho aún por descubrir”, explica el director del proyecto financiado hasta ahora de forma exclusiva por el Ayuntamiento de Mojácar. Más allá del descubrimiento de utensilios decorativos como las vasijas vidriadas en muy buen estado de conservación, sin duda entre los grandes hallazgos de esta segunda fase se encuentra el camino de acceso a la población con parte de su puerta o el incremento del número de torres alrededor de la muralla de la que ya se observan importantes restos, ya que las torres documentadas han ascendido hasta un número de quince, lo que “habla de un castillo con una importancia importante para el siglo XII o XIII”, considera Martín.

Otro de los descubrimientos para muchos vecinos ha sido presenciar ‘in situ’ el laborioso trabajo de decenas de jóvenes que han procedido con una meticulosidad de cirujano durante todo el mes de julio a desenterrar parte de la historia de Mojácar. Ahora es turno de que, al igual que ellos y más allá del Consistorio, el resto de administraciones también arrimen el hombro.