Los padres y madres del colegio Celia Viñas de Berja no pueden más y han decidido denunciar los "recortes" que llegan al centro en pleno debate por la vuelta al cole durante la pandemia del coronavirus. "El colegio lleva sufriendo recortes desde hace dos años y este curso, lejos de mejorar la situación para paliar los efectos del COVID-19, el problema se repite", lamentan desde el sindicato USTEA y desde el AMPA del CEIP Celia Viñas de Berja, por lo que han decido anunciar movilizaciones para evitar que los "recortes" sigan produciéndose en el centro escolar virgitano.
Según el sindicato y los padres, con la supresión de otra línea en infantil, ahora desde la Consejería de Educación "eliminan a otro maestro o maestra de esta etapa más al maestro de apoyo", por lo que aseguran que, de este modo, acaban encontrándose con menos profesorado y con las aulas más masificadas aún. "Esta situación, si ya es poco entendible en circunstancias normales, es menos aún en la coyuntura actual de pandemia, en la que la bajada de ratios y el aumento de plantillas es más necesaria que nunca. No sólo se encuentran con que este hecho no sucede, sino que incluso empeora", afirman.
Educación especial
Si hay algo que les preocupa sobremanera es que, a su juicio, la delegación de Educación de la provincia de Almería ha dicho “no” a la apertura de un aula de integración del alumnado de espectro Autista, lo que, dicen, deja "muy perjudicadas" las condiciones educativas del alumnado de Educación Especial.
De este modo, los padres y madres del alumnado de educación especial del CEIP Celia Viñas de Berja afectados se encuentran indignados ante esta situación y ante la negativa de la Delegación a dar alguna solución al respecto y declaran: “En nuestro colegio existen dos aulas específicas con alumnado con diferentes problemáticas y edades ( desde 3 a 11 años) de los cuales, algunos de ellos necesitan ayuda total para su transporte, y todos necesitan ayuda y/o vigilancia para la mayoría de sus rutinas. El personal que atiende estas aulas es insuficiente. El colegio ha presentado varios escritos solicitando la creación de un aula TEA en nuestro colegio, ya que este abarca los pueblos de Berja, Dalias, Alcolea, Laujar, Fondón, Paterna y Bayárcal”.
Y es que, remarcan, la incidencia del autismo cada vez se eleva más. Según los últimos datos 1 de cada 100 niños tienen un diagnóstico en TEA. En el último comité de escolarización que se hizo en la localidad, todos los colegios vieron necesaria la creación de dicha aula dado el número de alumnos y alumnas con este diagnóstico en la zona. “Sin condicionar la decisión del colegio que abra este aula, lo cierto es que en todos los colegios públicos debería de existir un aula específica para que los demás niños aprendan de la diversidad y la importancia de la inclusión social”, subrayan los denunciantes, que sentencian: "La Delegación de Educación almeriense opta por no analizar el tipo de discapacidad de su alumnado, nivel cognitivo, edad o necesidad educativa y eleva la ratio de las aulas actualmente existentes, rozando incluso la ilegalidad".
Sin personal suficiente
El centro se está enfrentando a una situación de pandemia "en grave peligro", afirman, con alumnado de Educación Especial sin recursos para ser integrado en aula ordinaria como es su derecho y sin poder ofrecer una educación digna. De esta forma, y respaldados por la Asociación Altea autismo, el Ayuntamiento de la localidad y el sindicato de profesorado USTEA, los denunciantes defienden los derechos educativos del alumnado, como por ejemplo el derecho a tener un aula TEA con personal especializado para ello.
Y concluyen: "Estamos indignados por la decisión de la Delegación de Educación de aplicar los recortes a nuestros hijos, modificar las ratios a su antojo, ahorrarse la apertura de dicha aula y mezclar a todo el alumnado sin estudiar las características de cada niño y niña".
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