Año 2019. Llegaba la primera semana del mes de julio y, con él, San Isidro, la segunda pedanía más grande que conforma el municipio almeriense de Níjar, se preparaba para vestirse de gala y brindar honor durante varios días al patrón que da nombre al mismo lugar.
Los casi 8.000 habitantes del lugar, así como los cientos de visitantes que reciben esos días, estaban listos para disfrutar de las distintas actividades programadas durante cinco días sin saber que este sería el último año que vivirían las fiestas patronales en su máximos esplendor. El Ayuntamiento de Níjar las suspendería al año siguiente debido a que la desescalada, todavía con la primera fase en desarrollo, no permitía la celebración de las mismas.
Y es que las plegarias al copatrón de San Sebastián tan venerado por los agricultores del territorio almeriense no han sido suficientes para que este año, por fin, pudiera llevarse a cabo con normalidad toda la programación festiva.
Su historia
Atrás quedó la multitud que se agrupaba para presenciar el encendido del alumbrado junto con el saludo de Esperanza Pérez, alcaldesa de la localidad, y la gala de coronación que proclamaba a las nuevas reinas, damas y al rey. Con el característico repique de campanas que da inicio a los festejos, los nijareños rememorarán cómo los niños del pueblo acudían sin falta a los juegos infantiles organizados en la plaza de la iglesia.
La paellada, la chocolatada o la feria del mediodía brillarán por la ausencia de los vecinos que no podrán acudir del mismo modo debido a las medidas sanitarias impuestas por las distintas autoridades.
Arraigo
La fiesta de San Isidro agrupaba muchas otras actividades que se realizaban mayormente en grupo como torneos de fútbol, competiciones de futbolín o concursos de cocina con gran afluencia tanto de los residentes del pueblo como los de pedanías cercanas. Por esta razón, la ausencia de estos actos es más notoria aun si cabe, ya que formaban parte del arraigado calendario de los nijareños.
Lo mismo ocurrió con las pasadas fiestas en honor a San Sebastián, las cuales se redujeron a la misa en honor al patrón de la comarca de Níjar.
El año que viene
De este modo, los vecinos tendrán que esperar al próximo año para poder rendir a su patrón el homenaje que se merece. Este 2021 no habrá repique de campanas, juegos infantiles, pregón, coronación de reina y rey, caceroladas, carrozas, paelladas, alumbrado, atracciones, música ni torneos deportivos.
Será un año de paréntesis necesario. Parar para asegurar que, en 2022, las fiestas regresen con más fuerza que nunca. Y es que a veces hay que saber esperar. Los vecinos de San Isidro lo saben.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/217734/san-isidro-tendra-que-esperar-para-revivir-su-feria