El puerto de Garrucha, gestionado directamente por la Consejería de Fomento y Vivienda, experimentó un aumento significativo de su actividad comercial el pasado año 2011, cuando un total de 211 buques mercantes transportaron 3.102.587 toneladas de mercancías, lo que significa un aumento del 20% respecto al año anterior.
De esta forma, el puerto garruchero supera dos años de caídas, en los que la actividad comercial estuvo por debajo de los tres millones de toneladas. La mayor bajada se produjo en 2009, cuando se registraron 2,2 millones, mientras que en 2010 fueron 2,5 millones de toneladas de mercancías. La cifra de este año, sin embargo, significa un repunte que se aproxima a los 3,9 millones de toneladas de 2008.
El transporte de mercancías en el puerto de Garrucha se centra principalmente en la exportación de yesos procedentes de las canteras de Sorbas, lo que lo convierte en el puerto autonómico con mayor actividad comercial. Por este motivo, la Agencia Pública de Puertos de Andalucía acometió la pasada legislatura una inversión global de 20 millones de euros para la ampliación de esta infraestructura y su modernización integral, mejorando las condiciones del conjunto de actividades que en ella se desarrollan, tanto la de transporte como la pesquera, náutico-recreativa e industrial.
El puerto se ha ampliado hacia el norte y se ha construido un varadero y una nueva dársena náutico-recreativa. De esta forma el tráfico de camiones, que discurre por el nuevo dique más al Norte que el anterior, se separa del resto de actividades para evitar interferencias. A su vez, el nuevo acceso soterrado al puerto por carretera, que se encuentra en construcción, liberará al casco urbano del tráfico pesado.
La industria auxiliar de reparación y mantenimiento de embarcaciones dispone además de un nuevo varadero de 19.000 metros cuadrados, de los mayores de Andalucía. A su vez, el pasado mes de marzo se pusieron en servicio 336 nuevos atraques deportivos, con lo que la capacidad total de este puerto actualmente es de 622 atraques, convirtiéndose en el segundo mayor de la provincia de Almería, tras el de Almerimar en El Ejido. La integración puerto-ciudad se realiza mediante zonas verdes y una urbanización del borde de contacto consensuada con el Ayuntamiento para dar continuidad al paseo marítimo. Por su parte, la pesca gana en especialización de sus instalaciones, al liberarse de interferencias con el resto de actividades.
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