El hijo de Piorno sostiene que el médico no ocultaba un cuchillo

El asesinato del pediatra de Roquetas de Mar, Rafael Piorno, sigue generando revelaciones sobre el trágico suceso ocurrido el pasado 23 de agosto en Aguadulce. Tras el encarcelamiento de los presuntos responsables, la defensa de uno de los detenidos alegó que el médico portaba un cuchillo "escondido" con el que intentó defenderse de sus agresores. Sin embargo, Miguel Ángel Piorno, hijo de la víctima, desmintió esta versión rotundamente, afirmando que su padre "no portaba un cuchillo ni lo tenía oculto".

En una entrevista para el programa de televisión 'En boca de todos', emitido por la cadena Cuatro, Miguel Ángel advirtió que la defensa podría estar intentando orientar la narrativa del suceso por unos derroteros que puedan favorecer a sus clientes. "Entendemos que la otra parte buscará cambiar la narrativa para colocar a esta persona de León como cabeza de turco. Esa será una estrategia muy evidente", aseguró.

De acuerdo con las declaraciones de Miguel Ángel, su padre estaba en su casa "a la hora de la comida" cuando Óscar F.S. acudió al domicilio, con el pretexto de conocer el inmueble en venta. "Lo primero que hizo esta persona fue atacar a mi padre", explicó. Según el escrito de ingreso en prisión al que ha tenido acceso LA VOZ, "sobre las 15:45 horas del día 23 de agosto de 2024, Óscar F.S. acudió a la vivienda "simulando querer realizar una visita a la misma, que se encontraba en venta, agrediendo con un táser a Rafael Piorno cuando éste abrió la puerta de su domicilio, para posteriormente y a consecuencia de la defensa ejercida por Rafael Piorno con un cuchillo, asestar al mismo tres puñaladas con dicha arma en el cuello y a la altura de los hombros". La hora en la que se cometieron los hechos, coincidiría con una franja horaria destinada al almuerzo, como sostiene Miguel Ángel Piorno."No llevaba un cuchillo, se defendió con lo primero que encontró".

En cuanto a la relación entre Rafael Piorno y José Javier F.M., el Policía Nacional acusado de idear el robo, Miguel Ángel explicó que el agente era paciente del pediatra en su clínica privada. Negando cualquier tipo de contacto entre ambos más allá de esa relación profesional. No era amigo de mi padre. No lo consideramos parte de nuestra familia", explicaría en la entrevista. El auto de ingreso en prisión detalla que José Javier F.M. "acudió posteriormente a la vivienda con un atuendo que impedía reconocerlo", dado que conocía al médico por su relación profesional. Una vez llegado a la vivienda, "ambos", (Óscar F.S. y él), "maniataron al pediatra para evitar que pudiera pedir auxilio", produciéndose finalmente el fallecimiento de Rafael Piorno. Miguel Ángel Piorno, sopesa que, dada la relación profesional mantenida por su padre y José Javier F.M., el agente pudo haber analizado el perfil del médico, concluyendo que sería una víctima adecuada para un robo. "Estudiaría el perfil de mi padre y tomaría sus sus conclusiones para asignarlo ser una víctima de un robo".

Finalmente, Miguel Ángel relató cómo descubrió el trágico destino de su padre. Explicó que solían comunicarse telefónicamente hasta dos o tres veces al día, pero a partir del 23 de agosto, su padre dejó de responder. "El jueves hablé con él, el viernes le mandé un mensaje, no me contesta, lo llamó, no me contesta".  Alertado por este inusitado silencio que se postergó por un día más, Miguel Ángel Piorno contactó con una vecina para que se acercara a la casa. Siendo ella la que encontró el macabro suceso.