Roquetas de Mar

40 años de tradición y éxito: Los talleres de pintura más demandados de Almería

Aguadulce, El Parador, La Gloria y Roquetas de Mar son los enclaves de estas clases gratuitas

Marina Ginés
21:54 • 15 ene. 2025

Los martes de 18:00 a 20:00 y los miércoles de 16:00 a 20:00 más de una decena de alumnos acuden religiosamente a la Oficina Municipal de Aguadulce. ¿El motivo? Una cita ineludible con el arte. Es gratis, lleva 40 años en marcha y es un momento de convivencia y creatividad que une a sus participantes, así son los talleres de pintura más demandados de la provincia de Almería. Mariquina Ramos es la profesora del ya famoso y tradicional taller de pintura de Aguadulce. 

Pero estos talleres no empezaron con Mariquina al mando, sino que ella misma fue alumna hace más de 20 años de este taller gratuito y se podría decir que pionero en Roquetas de Mar. “Empecé como alumna con Juan Ibáñez el primer profesor de pintura de los talleres, que falleció en el 2017. Juan Ibáñez fue alumno de Cantón Checa, unos de los Indalianos y su amor por la pintura sumado al apoyo del equipo de Gobierno por aquel entonces que buscaba dinamizar la vida de los mayores del municipio pues iniciaron estos talleres que van a cumplir ya 40 años”.

Mariquina hoy mira con orgullo hacia atrás y no se puede creer hasta donde han llegado. “Todo comenzó de una forma muy modesta, para dinamizar la vida de los mayores de la localidad, solo había clases de pintura, cerámica, guitarra y danza y sólo estaban en Roquetas de Mar. Hoy estamos en La Gloria, en Aguadulce, en Roquetas y El Parador e incluso tenemos lista de espera”. Y aunque todo empezó como una forma de dinamizar la vida de los mayores de la localidad, gente de todas las edades se unen al equipo de trabajo, eso sí, tienen preferencia la tercera edad.

"Todos los años ampliamos grupos y todos los años faltan plazas, somos 12 alumnos por clase y si hay más solicitudes que plazas se hace un sorteo". También se ofrecen las plazas libres de otros puntos diferentes por si los alumnos se quieren desplazar. Compartir entre gente de todas las edades, de todas partes y tener ese ratito para aprender algo tan bonito, tan artístico y tan gratificante es una experiencia digna de ser vivida.

Ahora hablamos del "exitazo de los talleres municipales” orgullosos del trabajo realizado. La más veteranas, Rosi, Ramo o Carmen recuerdan sus clases con Juan Ibáñez. “Llevo más de veinte años pintando”. “No tenía ni idea de pintura cuando empecé, me gustaba dibujar, pero nunca había hecho óleo, o pastel, lo más difícil para mi es pintar con acuarela y la que más me gusta es el Oleo”, dice Ramo.

La profesora explica que, depende de los grupos se tocan diferentes técnicas, empezamos con el dibujo, continúan con el pastel que son las técnicas más asequibles y luego el acrílico. Este grupo es de acuarela y luego está el grupo de técnicas experimentales con uso de diferentes texturas y todo tipo de técnicas. Son 12 alumnas y un único chico en clase, que pese a ser minoría asegura que le tratan muy bien y anima al público masculino a que se anime a participar también de estos talleres.

Por otro lado, "las nuevas" aseguran que esperan seguir consiguiendo plaza el próximo año. “Yo vengo de Cataluña hace 4 años que estoy aquí y me pareció una maravilla que tuviéramos esta oportunidad de dar clases gratuitas y una forma ideal de conocer gente. Yo vine para cuidar a mi madre que ya es mayor, llevaba toda la vida fuera pero a día de hoy ya no me veo volviendo a Cataluña, yo me quedo aquí. Hay muchas exposiciones, mucha vida y la gente es sin duda lo mejor” asegura una de las alumnas de este taller que está encantada con sus clases de pintura.

Después de más de veinte años pintando eso sí, reconocen que ya no saben donde meter tantos lienzos. “Tengo todo el pasillo lleno de cuadros, cajas por todas partes”, relatan entre risas. Todos los alumnos exponen sus obras durante el verano en el Castillo de Santa Ana y algunos incluso venden sus obras. “Aunque a veces nos da pena venderlas”, aseguran entre risas.

Este año, como es costumbre, se expondrán todas las obras de los talleres de fotografía, cerámica y pintura en el Castillo de Santa Ana, en los meses de verano. La temática escogida para este año es la de los 7 pecados capitales. Las exposiciones son muy importantes porque es una forma de visibilizar todo lo que hacen las alumnas y alumnos durante el año y todos los roqueteros y visitantes pueden disfrutar de ello.










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