Vélez Blanco se levantaba ayer con una gran noticia. El joven velezano, Diego Gázquez, se había convertido en el alumno más sobresaliente de la provincia, tras obtener este año la mejor calificación en la prueba de acceso a la Universidad.
Sobresaliente
Una nota de 9.90 con la con la que ponía el colofón a un expediente académico brillante, con un 10 de media.
La mayor parte de los vecinos de esta localidad sabían de las dotes para el estudio de Diego y muchos ya habían vislumbrado su esfuerzo e inteligencia, pero pocos podían imaginar que tenían como vecino a uno de los jóvenes con más talento académico de Andalucía.
Pero su popularidad ya venía de atrás, ya que el pasado año fue elegido el rey de las fiestas en honor al Santísimo Cristo de la Yedra, que se celebran cada verano.
Diego Gázquez ha estudiado en el IES José Marín de Vélez Rubio y “a pesar del estrés de este último año, lo echaré de menos”. Aún consciente de sus altas calificaciones no se considera un empollón.
El esfuerzo
Para Diego Gázquez las claves de su éxito están claras, “estudiar mucho, bastantes horas al día e incluso los fines de semana”, pero sin renunciar a salir con sus amigos y disfrutar de sus variadas aficiones, “aunque sea en menor medida”.
Si bien a las habituales horas de clase ha añadido cada día una media de cinco horas de estudio, Gázquez asegura que ha tenido tiempo suficiente para disfrutar de todo lo que le gusta. Y hay pruebas de esto: “estoy muy implicado en la vida social y cultural de mi pueblo, toco el clarinete en la banda de música municipal, pertenezco a la coral “Andrés del Castillo” y soy mayordomo juvenil de la Hermandad de San Juan y la Verónica”, de la que es además cofundador. Ha tenido además tiempo para cursar el tercer año en la Escuela Oficial de Idiomas de Vélez Rubio y salir cada noche de sábado con sus amigos. ¿Y para ligar?, “también se puede compaginar”, asegura el brillante alumno velezano.
Las felicitaciones
Las calificaciones de Diego han causado mucha alegría y satisfacción en su entorno. Su padre, propietario de una empresa de construcción y su madre, dedicada a la limpieza, no caben de gozo. “Yo estoy muy contento y orgulloso porque esto es algo que no te lo esperas nunca y la verdad es que todo el mundo, familiares y mis amigos, también lo están”, ha explicado el joven que ha recibido decenas de llamadas para felicitarle.
El futuro
Ahora el futuro para Diego parece estar claro. “Quiero estudiar medicina en la Universidad de Granada, porque creo que es de las más prestigiosas de España”. Sin embargo hace apenas dos años esta no era su vocación: “desde siempre he querido ser arquitecto, de hecho comencé el bachiller en la modalidad de Tecnología, pero al final sólo lo cursé durante un primer trimestre, porque me di cuenta que no era lo que más me gustaba. Así que se lo dije a mis padres y a mis profesores y decidí a mitad de curso entrar en Ciencias de la Salud para poder estudiar después medicina. Tuve que recuperar todo un trimestre pero mereció la pena”.
El trabajo
Si bien aún no tiene clara la especialidad “me encantaría ejercer de médico en mi pueblo, al lado de los míos”, aunque aún es pronto para que esta idea sea definitiva. Ilusionado con la nueva etapa que va a comenzar, tiene la esperanza de que pasados los seis años que necesitará para acabar la carrera elegida la crisis haya finalizado y pueda ejercer en su tierra, “porque me da pena y considero muy injusto que los jóvenes formados en este país tengamos que marchar a la fuerza al extranjero para poder encontrar un trabajo digno. Que no podamos elegir quedarnos cerca de nuestra familia y trabajar en lo que nos gusta en nuestro país”.
Y es que Diego es un hombre comprometido, que apuesta por la educación pública. “Considero además injusta la nota que se pretende imponer para obtener una beca”.
Optimista
A pesar de ser consciente del paro juvenil es optimista y cree que podrá terminar ejerciendo en España, porque está seguro que su brillante expediente le facilitará la apertura de algunas puertas. Sólo se irá al extranjero “si no hay más remedio aunque mi ilusión es trabajar en España”.
Comprometido
Interesado en la vida política, a Diego le parecen “vergonzosos” los actuales casos de corrupción. “¡Que se esté robando tanto cuando estamos en una crisis como ésta!”. “No todos los políticos son iguales”, confirma, “y yo no descarto la posibilidad de entrar en algún partido”.
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