Ilusión y ganas por ver otra victoria del Almería de Rubi en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. 11.080 corazones rojiblancos se dieron cita en el recinto deportivo de la Vega de Acá, siendo la segunda peor entrada de la temporada en casa, aunque es una buena entrada, pese a la hora del encuentro, las 14:09 horas y sábado, con gente aún trabajando.
Los aficionados no pararon de animar en la primera parte y más cuando fue expulsado Gabri Veiga en el Celta de Vigo con el 0-1 en el Estadio de los Juegos Mediterráneos.
La afición del Almería disfrutó de lo lindo con los tres goles de un equipo, el de Rubi, que sigue creciendo en el Campeonato Nacional de Liga en Primera División.
Los abonados están con su Almería y encantados de la vida con la tercera victoria consecutiva en casa, que es donde debe construirse el objetivo de la permanencia. La afición volvió a casa muy feliz con tres puntazos.
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