Ni Fernando ni Pacheco. Diego Fuoli fue el elegido por Rubi para afrontar la primera eliminatoria de la Copa del Rey y pese a la eliminación ante el Arenteiro fue de los más destacados de la UD Almería. Tras una temporada en el filial, este verano pasó a formar parte del primer equipo y nunca podrá olvidar su debut.
La radio oficial del club se puso en contacto con el guardameta para analizar qué se siente tras defender al Almería. En la previa del choque en Espiñedo su rival, Diego García, le pidió la camiseta a la conclusión del duelo y no dudó en entregarla. Un bonito gesto de Fuoli para un compañero de profesión que quería quedarse con el mejor recuerdo de una noche histórica: "El portero del Arenteiro -Diego García- me pidió cambiar la camiseta y nada más terminar se acercó y se la di. Estaba decepcionado por la derrota, un golpe duro, y no me paré a pensar en guardármela como recuerdo".
La historia
Y es aquí donde Fuoli cuenta lo que le pasó hace unos años en el filial del Villarreal. Lo que iba a ser un detallazo para un joven aficionado del conjunto amarillo pasó a convertirse en un anécdota de las que no se olvidan: "Cuando jugaba en el Villarreal B íbamos a Catalunya había un grupo de gente joven que venía a ver los partidos y nos pedían camisetas. Un día se la di al acabar el partido y un amigo mío se metió en Wallapop, puso mi nombre y mi camiseta estaba en venta por 15 euros".
Sin respuesta
Se puso en contacto con la persona en cuestión pero ni llegó a responderle al mensaje en redes sociales. Seguro que Diego, portero del Arenteiro, sí la habrá guardado con todo el cariño en casa. "Le escribí al chaval porque sabía quién era de conversaciones por Instagram casi a diario y se lo comenté. Encima que te la doy no la vendas por 15 euros, ponla a 30 aunque sea -risas-. Me dejó el mensaje en visto. No se esperaba que lo encontrase", dice Fuoli.
Un premio
Cada sesión de Fuoli con el Almería es un premio al trabajo de tantos años e indica que en el Almería hay tan buen ambiente que no hay esos pequeños piques en el vestuario: "Un año bonito, disfrutar de los campos de Primera. En la portería solo juega uno y me he rodeado de compañeros que hacen que cada entrenamiento es un regalo. Hacemos muchos planes entre nosotros y desde que llegamos al Estadio hasta que nos vamos hay buen rollo. No se ven rencillas porque casi todos somos jóvenes y se dan todos los ingredientes para que vaya bien".
Descanso
Hasta la semana que viene no regresan al Mediterráneo y durante los días de descanso también harán tarea física para que no haya exceso de peso en el control posterior a las vacaciones: "Es una situación anómala para todos los equipos, una incógnita. Aprovecharemos estas semanas para hacer una pequeña pretemporada. El cuerpo técnico nos ha dado unas pautas a seguir en los días libres pero somos bastante responsables y volveremos en buena forma".
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