Siete días y siete noches

El fútbol se mueve por impulsos y la UD Almería afronta el retorno a la competición con una asignatura pendiente. Un gran problema que ha acompañado a la plantilla desde que se inició la competición allá por el 14 de agosto. Los datos no engañan: el equipo es el peor visitante de la categoría, pero también uno de los mejores locales.

Solo el Almería es capaz de tener más puntos en su estadio que dos de los clubes que ocupan plaza de Europa, así como sumar menos que el colista Elche, que aún no ha ganado en catorce jornadas. Siete compromisos en el Mediterráneo de un magnífico nivel solo con el borrón de Osasuna; y otros siete a domicilio donde la mejoría no se vio plasmada en el resultado. Siete días y siete noches para el Almería.

EN CASA

Quince puntos para ser, y con diferencia, el mejor local de los conjuntos que luchan por la permanencia. Solo se le acercan Real Valladolid, con trece, y Real Mallorca, con 11. Incluso ha sumado más que la Real Sociedad, tercero pero con once en el Reale Arena; y Atlético de Madrid; con ocho. FC Barcelona (19), Real Madrid (17), Athletic Club (16), y Real Betis (16), son los únicos que puntuaron más que el Almería como local. El resumen es muy claro: es el quinto mejor local de Primera División.

FUERA

Se apagó la luz. El calendario fue especialmente cruel con la plantilla de Rubi. Las derrotas contra Valladolid, Real Mallorca y Athletic Club no tuvieron discusión, mientras que la mejoría con Real Betis, Villarreal y FC Barcelona tampoco se vio recompensada en el marcador. Solo el empate en Elche con gol de Umar Sadiq le dio un punto. Es, por tanto, el peor visitante de Primera y también el que menos marca, con tres dianas, pero no e el que más encaja. Valladolid (15), Celta (15), y Elche (18), tienen más problemas defensivos.

No se muestra nervioso Rubi por las cifras como visitante esta temporada porque la media de las últimas jornadas es de tres puntos de cada seis, que ya lo firmaría cualquiera de los que pelea por la salvación. De la fiesta en el Mediterráneo a la pesadilla fuera. Ganar en Cádiz serviría para romper la dinámica y echar el cierre a un 2022 histórico para el balompié almeriense.