El Almería para operaciones

La UD Almería entra en stand-by, en pausa, se detiene. Aunque hay futbolistas que están pendientes de su futuro a partir del 30 de junio, como Francisco Portillo y César de la Hoz, que terminan su vinculación con el club, en los despachos del Mediterráneo la prioridad absoluta es dar tranquilidad al vestuario y centrarse exclusivamente en lo importante, que es la permanencia.

Durante el parón del Mundial se llegó a hablar de la continuidad de Rubi, cuyo contrato expira en dos meses, e incluso El Assy reconoció que iniciarían conversaciones para alcanzar un acuerdo y preparar la próxima temporada. Más destacado fue el tema De la Hoz, al que el director general y consejero delegado cerraba las puertas de su renovación por desavenencias con su representante, Álvaro Domínguez, el mismo de Fernando Pacheco.

Análisis
Son El Assy y Gonçalves quienes manejan todo en el Mediterráneo y las conversaciones bien con Rubi o con los futbolistas se retomarán cuando acabe la temporada. Curiosamente fue Rubi quien ya anunciaba en Navidad que es mejor esperar a lograr los objetivos antes de tomar decisiones.

En el club han analizado los problemas de la plantilla de cara al futuro, pero que ese futuro sea en Primera División pasa por una estabilidad a nivel de vestuario, despachos y afición.

Despistes
La estabilidad que ha conseguido el Almería en estos años con Turki Al-Sheikh en la presidencia contrasta con los nervios de Valencia y Sevilla, nada acostumbrados a vivir cerca del descenso; o incluso Espanyol y Valladolid, que recurrieron a un cambio en el banquillo a falta solo de once jornadas para el final.

En el Estadio el mensaje tanto al corazón del grupo como al exterior es el de la estabilidad. Que Gonçalves está peinando el mercado es evidente porque como asesor nunca tiene descanso. Sin embargo, cualquier toma de decisión importante llegará cuando se dispute la última jornada de Liga.

Contratos
Son cuatro futbolistas los que terminan contrato con un caso especial. Portillo, De la Hoz y el portero Fuoli quedarán libres a partir del 30 de junio, mientras que Suárez firmaría seis campañas de rojiblanco en caso de salvación. Luego está Rubi, que desde su llegada al club hace ya dos años cuenca con el respaldo de los jefes para acabar el campeonato. Habrá que analizar, y ojalá que sea con la plaza en Primera, si el catalán entra en los planes del nuevo proyecto. 

Como sucediera el año pasado en las semanas donde se decidía el ascenso, el Almería se bunkeriza y aparca conversaciones y renovaciones con futbolistas y entrenador. Después de la visita al Espanyol el 4 de junio comenzará a activarse la maquinaria de El Assy y Gonçalves. Ahora el objetivo es la salvación para darle continuidad a los objetivos.