Solo una hecatombe mandaría a la UD Almería a Segunda, pero puede ocurrir, así que toca viajar al campo del Espanyol, ya descendido, para jugarse el objetivo. Empatar con el Real Valladolid fue un golpe anímico del que pronto se levantarán jugadores y aficionados porque hay que pelear en el último baile de la temporada. Hasta Rubi se presentaba tranquilo en rueda de prensa.
Poco más que añadir a un choque en el que se sintieron dominadores, generaron oportunidades y solo la falta de puntería les privó del triunfo. Masip se hizo grande ante Sousa y Lázaro se estrelló con el poste. Después, un poco de nervios y a amarrar el resultado. "Primera parte fantástica, de las mejores de la temporada donde tendríamos que haber desequilibrado la balanza. Lo importante es que el equipo la ha peleado y la ha merecido. Ya sabíamos que es un jeroglífico de resultados y combinaciones y seguimos dependiendo de nosotros. Nos vale empatar y ganar en la última jornada pero confiamos en ver al Almería en Primera", apuntó.
Puntería
Lo peor del Almería llegó al final. Fueron minutos de indefinición, de no saber si lo mejor era buscar la portería rival o aguantar para no arriesgar más. La gestión inicial fue perfecta pero el resultado le fue afectando a los futbolistas: "Teníamos que buscar el gol sin volvernos locos. El equipo ha llegado un pelín cansado al final y cuando has tenido tantas y no has marcado pues mejor aguantar un poco. Nada que reprochar".
Aparta Rubi el rendimiento de otros equipos y marcadores extraños de otros campos. El Almería depende de sí mismo en el campo del Espanyol y sumando ya se deja de historias. Eso sí, mejor no fiarse de un rival que acaba de descender: "Espero que no haya resultados extraños porque confío en que todos compitan hasta el final. Vamos a centrarnos en nosotros porque dependemos de nosotros mismos. Sacando uno o dos puntos nos salvamos".
Ambientazo
Le encantó lo que se vivió la previa con el recibimiento a los jugadores y la forma de llevar el partido. Almería dio de nuevo un paso adelante cuando más lo necesitaban los profesionales y solo faltó la guinda del triunfo, que además era el de la salvación: "El ambiente ha sido sensacional y la primera parte ha sido extraordinaria. No hemos estado nerviosos, sí quizá un poco al final. El día del Cádiz o del Elche vi más nervios. Hay que rematar la faena en Barcelona".
Visita a Cornellá-El Prat
Lamenta el descenso del Espanyol, un club al que le tiene un cariño especial, pero recuerda que hay tanto en juego para el Almería que no se detiene a pensar en nada. Es la última semana de la temporada con una plaza de descenso abierta: "Siempre deseo el bien a los clubes donde estoy y sé que es un día triste para el Espanyol, y para mí. Me pongo en modo Almería al 100'% y no me paro a pensar en nada más. Lo especial sería salvar la Primera División".
Vuelta de Touré
En los minutos de El Bilal Touré existía un riesgo importante de recaída: "Hemos jugado con fuego con El Bilal Touré porque hemos avanzado en su puesta a punto. No es lo mismo entrenar que competir y nos da algo de margen esta semana para que no recaiga. Orgulloso de la plantilla como Chumi, Kaiky, que también arrastran lesiones".
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