A Garitano no le asusta la crisis

Cuatro partidos y cuatro derrotas. Es la cruda realidad y la tienen que aceptar jugadores, cuerpo técnico y aficionados del Almería. La llegada de Gaizka Garitano fue un soplo de aire fresco en el vestuario pero ha faltado lo más importante: ganar. El preparador vasco reconocía que no podía estar contento con su primer mes rojiblanco y se siente preparado para levantar de una vez por todas al colista de Primera.

Es una situación novedosa para los profesionales, ya que nunca habían afrontado trece jornadas sin conocer el triunfo, aunque a Garitano no le viene grande este reto. En sus 144 partidos en la élite del balompié atravesó rachas incluso peores que en el Mediterráneo, en especial siendo entrenador de la SD Eibar. Debutó en Primera en la 2014-2015 y pese a su magnífico inicio de campeonato su equipo terminó cayendo poco a poco y bajó, curiosamente junto con el Almería, pero fue repescado por el descenso administrativo del Elche a Segunda División. Contó con la confianza de la directiva armera por haber sido el hombre que llevó al club desde 2ª B a lo más alto del fútbol.

En datos
Aquel curso Garitano afrontó dos crisis importantes de marcadores. Llegó a encadenar ocho derrotas consecutivas: Real Sociedad (1-0), Atlético de Madrid (1-3), Deportivo (2-0), Elche (0-1), Villarreal (1-0), Athletic (0-1), Levante (2-1), y FC Barcelona (0-2). Se rompió con un empate en Granada. Le ganaría al Málaga 1-0 y volvería a sumar seis tropiezos: Real Madrid (3-0), Celta (0-1), Almería (2-0), Sevilla (1-3), Valencia (3-1), y Espanyol (0-2). Esas fueron las peores rachas de Garitano en un banquillo de 1ª y se sintió respaldado.

Con el Deportivo, en la 2016-2017, no pudo terminar su obra porque fue cesado en la jornada 24 una vez sumó cuatro jornadas sin puntuar: Leganés (4-0), Alavés (0-1), Athletic (2-1), y Eibar (3-1). También acumuló cuatro derrotas seguidas con el Athletic Club en la 2019-2020: Getafe (0-2), Real Sociedad (2-1), Osasuna (0-1), y Alavés (2-1). Luego reaccionó con dos victorias. En su último año con el Athletic fue cesado incluso tras ganar 1-0 al Elche, pero los bilbaínos mantuvieron una irregularidad que no convencía y Garitano puso punto y final a su etapa en San Mamés el 3 de enero de 2021. Esto quiere decir que el entrenador del Almería no es un novato ni le viene de nuevas la crisis por la que atraviesan los rojiblancos.

Reacción
Antes de que termine el año le quedan por delante Getafe, Real Betis, Atlético, Mallorca y Barça. Será vital para mantener opciones de permanencia sacar una o dos victorias. Acumula 144 partidos en Primera con 44 triunfos, 36 empates y 64 derrotas para un total de 168 puntos.

Confianza en Eibar

Dos etapas en Ipurua para Gaizka Garitano. Tras colgar las botas pasó al mundo del entrenador y llevó al Eibar de Segunda B a Primera por la vía rápida, y aunque descendió, fue repescado por los problemas administrativos del Elche. En 2021 llegaba de nuevo al club armero y perdió el ascenso directo en la última jornada, brindándoselo al Almería. En el Play Off caería con el Girona. Pese a todo, Garitano siguió en el equipo y volvió a meterlo en las eliminatorias, perdiendo esta vez con el Deportivo Alavés. Ahí fue cuando acabó su etapa azulgrana.

Nunca fue cesado en Eibar y es el club que le dio casi todo como técnico. Ahora es el Almería quien le da las llaves de un proyecto que vive horas bajas.