Cada comparecencia de Jonathan Viera es una delicia. Al margen de dejar titulares y mensajes contundentes, no tiene miedo a hablar de su futuro cuando cuelgue las botas. En primer lugar el centrocampista canario quiere hablar de Pepe Mel, el nuevo inquilino del banquillo rojiblanco. Es un técnico ya veterano, experimentado, que sabe tocar las teclas correctas del vestuario y más el de una UD Almería que no conoce la victoria desde mayo del año pasado: "Tenemos una relación muy buena, muy estrecha. Hablamos por WhatsApp alguna vez y es un técnico al que le tengo mucho aprecio por todo lo que hemos vivido juntos y es una persona muy buena e íntegra. Yo creía que mi carrera terminaría en Las Palmas y no me hubiese imaginado ir a Gran Canaria ahora de la mano de Mel".
No quiere entrar en cuestiones tácticas de Mel, sino en cómo va a ser el día a día bajo su paraguas. Es una persona que sabe llegar al corazón del grupo sin perder la esencia. Desde el domingo espera ver un nuevo Almería, un equipo que logre ganar de una vez por todas un partido en la máxima categoría: "Lo principal que nos va a dar es aire fresco, y no quiere decir que el anterior no lo tuviera, sino que al final las victorias dan mucho y cuando llevas tanto tiempo sin ganar entre una cosa y otra es complicado tener felicidad. El míster va a darnos ese aire fresco, quiere que estemos felices en el campo con el balón, y estamos contentos".
Carrera
Porque Jonathan Viera no tiene miedo a hablar de su futuro, de sus planes cuando el cuerpo diga "basta". Aquí tiene contrato hasta 2025 y avanza que se está preparando para ser técnico. Echa la mirada atrás y recuerda cómo va cambiando la vida de los profesionales conforme se cumplen años: "Estoy empezando a formarme como futuro entrenador. No sé si seré bueno o malo, porque ahora quiero un par de años buenos jugando, pero lo más complicado del fútbol es que llegue el mensaje y transmitir algo a los futbolistas para que te sigan en el vestuario. Cuando tienes 20 años te centras en jugar, en desbordar, todo lo que sea individual, y con los años empiezas a ver todo más de manera colectiva y te das cuenta de otras muchas cosas".
Por capacidad de liderazgo no va a ser. Viera ya ha demostrado en todos los equipos que ha estado que le gusta conectar con el vestuario y en el Almería ejerció de líder desde su fichaje. Todo el aprendizaje se lo quiere llevar a los banquillos en no mucho tiempo: "Me sale innato. Con los años he ido mejorándolo y he estado con compañeros que me han enseñado a saber hacer cosas en momentos determinado, entrenadores en los que me fijé, y todo eso que vas recolectando te lleva a esto".
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