Tercer triunfo consecutivo de un Almería que despega. El 1-2 de Cartagena viene marcado por una primera media hora de ensueño con un gol de Sergio Arribas que se quedaba corto. De golpe, el equipo se desconecta y da vida a su rival hasta el punto de que le empata, le marca el segundo y el VAR corrige por fuera de juego de Jairo. Quitando eso, los rojiblancos fueron superiores y merecieron llevarse los tres puntos. Ya en sala de prensa, Rubi comentaba que estas cosas suelen pasar en Segunda y no porque el rival vaya último se va a ganar con facilidad: "No se ha sufrido más de la cuenta, sino lo mínimo que suele ocurrir en Segunda División. Tuvo un cuarto de hora en el que pudo dar la vuelta al resultado, pero es verdad que antes pudimos irnos con más de un gol de ventaja. Somos justos vencedores".
Volver a encajar no le preocupa tanto a Rubi, sobre todo porque en ataque se convierte en algo habitual que se hagan dos tantos por encuentro, números impresionantes. Siempre se decantó por los partidos abiertos y como ocurrió contra Elche, Deportivo y Cartagena, si hubo apreturas en el luminoso fue por el error a la hora de definir. Se trata de un Almería vertical e imparable: "El duelo era más difícil de lo que dice la clasificación. Dos delanteros que pelean, que dificultan, así que contento por volver a marcar dos goles. Soy un promotor del juego ofensivo de toda la vida, me encanta, y doy prioridad a marcar más goles que a evitar encajar". Para explicar el mal tramo del primer tiempo cree que la clave estuvo en la pelota: "Había que recuperar el balón. Del minuto 30 al 45 tuvimos imprecisiones y le dimos posibilidades al Cartagena. Cambiamos el doble pivote de perfil por diversos matices tácticos y nos dio resultado".
En forma
La felicidad con la que se marchó el millar de rojiblancos que acudieron a Cartagonova no tiene precio para el cuerpo técnico y el vestuario. "Muchísimas gracias a nuestros aficionados y no sabéis lo feliz que me hace esta victoria. Trabajamos para ellos", apuntó Rubi. Volviendo a lo táctico, el catalán confirma el gran momento de forma y de confianza de sus jugadores, que tienen la oportunidad de dar otro salto de gigante el próximo martes si gana al Córdoba en el Mediterráneo: "Somos más intensos en todo lo que hacemos, menos contemplativos, y con su idea de juego genera situaciones de gol con asiduidad. Esta Liga es durísima para todo y vamos a intentar seguir puntuando contra el Córdoba". Y contar con Luis Suárez, que lleva 10 goles, también es un lujo increíble.
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