Málaga 1-1 Almería: El corazón también da puntos

Punto de corazón en La Rosaleda. El fútbol no le dio la espalda a un Almería que no merecía volver de vacío de Málaga y que empató en el último suspiro tras un córner. Fue el típico duelo de Segunda, con disputas, faltas, tarjetas, protestas, ocasiones y dos aficiones entregadas. El resultado permite a los rojiblancos permanecer en la tercera plaza con 32, aunque habrá que esperar al choque del Sporting en Cartagena.

El inicio del partido le vino grande al Málaga, permitiendo a Suárez, Melamed y Arribas construir jugadas sin demasiada oposición. Alfonso Herrero tenía que ordenar a los suyos para aguantar a cero. Y justo cuando mejor se encontraba el equipo tocaba el regalo de cada fin de semana. Centro libre de marca de Puga que remata Dioni entre Édgar y Chumi. Pelota al poste, Fernando se la encuentra de golpe y estallaba La Rosaleda. Se juntó la fragilidad en las marcas con la mala suerte. De dominar a complicarse la tarde porque el 1-0 le encanta al Málaga.

Ocasiones
Los blanquiazules sentían el aliento del Almería en cada acción de ataque, superados por su velocidad y verticalidad. Pero esta vez no hubo tanta dinamita ni toma de decisión correcta para acabar las acciones. El Málaga, que con el marcador a favor llevó el duelo a su terreno, demostró por qué cuenta con una de las defensas más seguras. Se llegaba al descanso con 1-0 y la sensación de que el favorito iba a desgastar y a asustar más en la segunda mitad. Fue todo lo contrario. Bajaron las pulsaciones, el ritmo, había más faltas y hasta caían dos balones al campo. Todo se le complicaba al Almería y el tiempo corría a velocidad de vértigo. 

Ritmo
No se vio al equipo con la contundencia en ataque de cada día porque le costaba conectar con Luis Suárez. Al paso de los minutos se unía la desesperación con el arbitraje de González Díaz, casero en varias de sus decisiones. Hasta Rubi fue amonestado por el asturiano. El millar de rojiblancos que viajó a La Rosaleda aguardaba el último empujón, ese talento que rebosa en la plantilla para al menos rescatar un punto. Fue en el último córner, botado por Arribas, y en el que Édgar molesta lo suficiente a Pastor para introducir la pelota en la red. Se celebró con rabia en el banquillo y en la grada, ya que el empate en partidos como este da mucho a nivel moral y clasificatorio. Vale que la segunda plaza pasa ahora a manos del Mirandés, pero el 1-1 significa lanzar un mensaje de autoridad a la categoría. Va a ser muy difícil ganar a este Almería con las virtudes y carencias que siempre le acompañan.

Tapón
El segundo tiempo no fue brillante como de costumbre, había menos caudal de fútbol ofensivo, y fue mérito del Málaga, solidario en defensa y empujado por el marcador, y es que ganarle al Almería es el premio que todos quieren. Precisamente este duelo enfrentaba a un equipo férreo en el esfuerzo defensivo, y el mejor ataque de Segunda. El resultado confirmó las dos cosas e hizo justicia. El típico punto que te puede dar un ascenso cuando haya que hacer cuentas con el resto. No era una visita a Málaga para sacar el traje y la corbata, sino de sudar y pelear hasta el último suspiro. Ahí fue cuando llegó el estallido rojiblanco.

FICHA TÉCNICA

MÁLAGA Alfonso Herrero, Víctor, Nélson Monte, Pastor, Puga, Manu Molina (Einar, 87’), Luismi, Kevin Medina (Antoñito, 63’), David Larrubia (Aarón Ochoa, 76’), Julen Lobete (Izan, 86’), y Dioni (Sergio Castel, 76’).

UD ALMERÍA Fernando, Langa (Centelles, 60’), Édgar, Chumi, Marc Pubill, Gui Guedes (Melero, 13’), Dion Lopy, Nico Melamed (Baptistao, 60’), Arnau (Pozo, 69’), Sergio Arribas y Luis Suárez.

GOLES 1-0, min 12: Dioni. 1-1, min 96: Pastor en propia puerta.

ÁRBITRO González Díaz.