Almería 2-3 Leganés: Un lamento no oscurece un brillante futuro

La crueldad del fútbol en estado puro. El Almería rozó la heroica y olió los cuartos de la Copa del Rey pero este deporte no entiende de merecimientos ni de hubieras. Los hechos dictan sentencia y el Leganés, sin ser superior al líder de Segunda, se clasifica en un tramo final eléctrico donde se mostró más oportuno a la hora de definir. Un penalti de Pubill a Raba metió en faena a un rival de Primera que se veía con la soga al cuello y sin complicar a Fernando. En ese cara a cara por ganar y evitar a toda costa la prórroga el Leganés fue más certero y acaba con el magistral camino copero del conjunto rojiblanco.

Valentía
Borja Jiménez trató al Almería como un grande, un rival temible al que si le dejas un metro te finiquita. La misión era tapar a Arribas y Suárez y no había sensación de control total por ninguna de las partes. Existía respeto a partirse y dejar espacios y el primer fallo llegó por parte almeriense. Falta de contundencia para despejar que Altimira aprovecha para batir a Fernando. Sin embargo, el plan no iba a cambiar.

Rubi juega con una carta que le hace ganar incluso con la eliminación de Copa. Luis Suárez es un delantero diferencial, con nivel de un Primera de altas miras y de sus botas, en pared con Arribas, salió el golazo del 1-1. La calidad individual al servicio del líder de plata para soñar con cuartos. En el segundo tiempo el Almería se soltó yendo a por la victoria manteniendo el orden. Melero, imperial y a un ritmo hasta ahora inédito en sus dos campañas y media en el club, dirigía la orquesta, y en una acción que él mismo inicia y continúa Pubill, el recién ‘fichado’ Lázaro remata con clase a la red para hacer el 2-1. Con más fútbol, verticalidad y peligro que el Leganés, la sorpresa -o no tanto- saltaba en el Mediterráneo.

Rotura
A raíz del 2-1 Borja Jiménez sacó toda la artillería y el Leganés consiguió aunar la calidad individual con el toque de gracia en el área. Penalti claro de Pubill a Raba que transforma De la Fuente, cuyo error fue dirigirse a la grada pidiendo más silbidos. Nadie quería irse a 30 minutos más de octavos de Copa y de pedir Suárez un penalti a la jugada del 2-3 con centro de Juan Cruz y remate de Diego García. El oportunismo ‘pepinero’ en los metros finales apagaba la llama de los cuartos para el Almería. El enfado por la ocasión perdida y el desánimo llenaban el terreno de juego, pero a cada minuto que pasaba el futbolista levantaba la mirada con fuego en los ojos. Si había que quedar fuera del torneo debía ser así, con tu idea, con el juego que te ha llevado a liderar Segunda. 

En línea
Como los técnicos van más allá de los resultados, Rubi puede llenar su hoja de apuntes con más pros que contras. Va sumando efectivos a una plantilla cogida con pinzas por virus y lesiones. Quien entra no desentona, ni siquiera un Lázaro sin ritmo pero que tiene gol y entra en la rueda positiva de los compañeros.

El lamento de la derrota no oscurece el brillante futuro que le espera al Almería. El fútbol premió al oportunismo en las áreas y deja a los rojiblancos sin los cuartos de final. Un adiós cruel con el honor de mirar a la cara a un Primera.

FICHA TÉCNICA

UD ALMERÍA Fernando, Centelles, Édgar, Kaiky, Pubill (Perovic, 90’), Lopy, Melero (Robertone, 80’), Sergio Arribas (Leo Baptistao, 80’), Lázaro Vinicius (Nico Melamed, 72’), Arnau Puigmal (Pozo 72’), y Luis Suárez.

LEGANÉS Juan Soriano, Javi Hernández, Nastasic, Sergio González, Altimira, Cissé (Neyou, 65’), Renato Tapia (Juan Cruz, 65’), Roberto López, Munir (Raba, 70’), Brasanac (Miguel de la Fuente, 70’), y Diego García.

GOLES 0-1, min 33: Altimira. 1-1, min 37: Luis Suárez. 2-1, min 51: Lázaro . 2-2, min 75: De la Fuente, de penalti. 2-3, min 86: Diego.

ÁRBITRO De Burgos Bengoetxea.