El almeriense que elabora incienso para las cofradías y envía al resto de España

La Semana Santa es una fiesta que se percibe por los cinco sentidos: se ve, se escucha, se puede palpar, tiene sabor y también olor. La nube de incienso que acompaña a los desfiles procesionales de la Semana Santa de Almería intenta resumir a través de los incensarios la idiosincrasia y la historia de las propias hermandades. Al menos es el objetivo que persigue José Antonio Sánchez, artesano almeriense con cuyas manos moldea el perfume de las cofradías de Almería.

Se cumplen ahora dos años desde que este almeriense decidió emprender su camino laboral situándose cerca de lo que hasta hace muy poco tiempo formaba parte de su ocio. Desde muy joven Sánchez ha permanecido muy cerca de las cofradías de Almería, conoce sus entresijos y sus raíces más profundas. Ahora, después de varias décadas, él se ha convertido en una de las figuras más importantes de la propia celebración. Tras el resurgir de la fiesta, este artesano almeriense ha fabricado en lo que va de año más de 60 kilos de incienso que se distribuirán por las hermandades de la provincia de Almería y también en casi una decena de provincias españolas.

Con sus manos amasa los kilos de incienso que posteriormente serán quemados durante la celebración litúrgica de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo. Ese mismo objetivo lo llevó a desplegar su conocimiento sobre la mezcla de especias. "Yo he sido desde siempre de los niños que compraban incienso cuando iba a Sevilla y hacía mis experimentos mezclando unos inciensos con otros. Se puede decir que desde siempre me ha gustado este tema". 

Gracias a su especializado oficio, este almeriense ha sabido convertir su afición en lo que hoy día es su profesión. Hasta tal punto que a día de hoy es el principal proveedor de este material de Catedral de Almería y de diferentes cofradías que desfilan en distintas jornadas. "Estamos empezando y estamos buscando un mayor asentamiento en este mundo. Nosotros lanzamos nuestra marca en marzo de 2019" y se toparon de lleno con la situación sociosanitaria generada por la Covid-19 en Almería y que también afectó al resto del país. "Tampoco hemos tenido mucho tiempo de poder darnos a conocer, sin embargo este año sí que estamos realizando ese trabajo que no pudimos desarrollar en estos dos años pasados y en el que estamos teniendo más volúmen de hermandades que han requerido de nuestro trabajo".

Fruto de las restricciones decretadas por los diferentes órganos públicos, Inciensos Catedral, no contó con la situación idónea para la divulgación de su trabajo ni para conectar su labor con las hermandades de la provincia de Almería. No obstante, durante estos dos años han servido para desempeñar una labor de comunicación que ha tenido como único objetivo ofrecer a las diferentes cofradías una nueva opción con sello y personalidad propia, lejos del convencionalismo de las grandes cadenas comerciales. "Cuando empezamos a dar a conocer nuestra fabricación de incienso, muchas cofradías ya se habían abastecido para diferentes años, por lo que la oportunidad que nos quieren dedicar alguna de ellas, tendrá que esperar algún tiempo", señala el almeriense.

La fabricación de olores guarda muchos secretos. A través de sus ingredientes, muchos de ellos secretos, logran construir una estructura sólida que tiene como base la resina que importa de países como Grecia, Sudáfrica o, incluso, de India. Una tarea que dificulta el día a día de su negocio, cuyo mayor dificultad lo añade el transporte de este material a través de las diferentes aduanas que tiene que sortear hasta ser recibido en Almería. "Se puede usar resinas de otras partes y de otros fabricantes pero entonces no conseguimos la exclusividad de nuestro producto. El resto de tareas consisten en probar las diferentes mezclas y pensar nuevas fórmulas para saber si lo tenemos que desechar o no".

Realizar las mezclas de los productos que José Antonio Sánchez elabora en su taller está llena de detalles que se deben cuidar para ofrecer la calidad acostumbrada en su resultado. El grosor de los granos de resina y las especias que lo admiten forma parte de esta labor de manufactura que intenta resumir a través del olfato la historia de la propia agrupación religiosa. "Se mezclan especies, flores, vainilla, canela, clavo, romero o rosas son los ingredientes que más utilizo y los que más me demandan para las procesiones".

"Buscar la exclusividad en los inciensos que vendemos es nuestra razón de ser. La Semana Santa de Almería conserva un buen aroma, pero muchas hermandades apuestan por inciensos de serie, que no logran caracterizar a las propias cofradías. Nosotros intentamos que cuando la procesión esté en la calle, se llegue a reconocer fácilmente de qué hermandad se trata", apunta Sánchez. Que acierta en señalar que para desarrollar este trabajo se necesita establecer una relación muy cercana con los miembros de junta para lograr el resultado que van buscando. "No es lo mismo una cofradía de negro, que suelen quemar incienso más secos y más duros, que una hermandad de barrio, que son hermandades que invitan a un mayor dulzor en sus inciensos".

El cuerpo de acólitos del Resucitado, el Silencio y la Soledad procesiona esta Semana Santa, Dios mediante, con el sello de este joven almeriense que dotará a su festividad de una personalidad mucho mayor gracias a su labor artesanal. A estas hermandades se le suman otras muchas de la provincia que ya han mostrado su interés para incluir sus resultados en las próximas estaciones de penitencia. Ejemplo de ello son los diferentes puntos de España como son Manzanares, Ciudad Real, Barcelona, Alicante, Córdoba, Málaga y Huelva que reclaman sus productos para sus respectivas celebraciones. 

Una vez pasada esta inminente celebración, José Antonio Sánchez ya comienza a preparar otra carrera de fondo que resulta igual de exigente; surtir a las hermandades de gloria de incienso para sus respectivos desfiles procesionales que tendrán lugar tras la celebración de Pentecostés.