Churros en Almería: ocho sitios para chuparse los dedos (y segunda parte)

Las ocho primeras propuestas nos sabían a poco y vamos a seguir de paseo por Almería: desde la falda de la Alcazaba hasta lugares de extrarradio, ‘La Foodineta’ ya recorrió algunos barrios de la capital en busca de los mejores churros de Almería, y ahora seguimos de ruta. Ya sea en el centro o en rincones de la ciudad menos transitados, este es nuestro nuevo paseo de churrería en churrería:

El centro

Ir al centro en busca de churros es, al mismo tiempo, un problema y algo similar a ir a La Meca en peregrinación. Ahí encontraremos los que más fama tienen y los lugares más concurridos. Pero también será más difícil elegir entre las muchas y muy diversas opciones que encontraremos.

Uno de esos imprescindibles de los churros almerienses está en la plaza Marqués de Heredia (más popularmente conocida como la plaza de los Burros): aunque haya cambiado su estética, los churros del Colón siguen siendo un clásico de los desayunos y las meriendas almerienses.

Y la siguiente parada de nuestro trayecto por el centro no está muy lejos: en el Paseo de Almería encontramos dos de los lugares que más churros han servido en la historia de la hostelería almeriense. No en vano, el Parrilla Pasaje y el Coimbra son dos de los rincones más típicos para degustar churros a casi cualquier hora del día.

¿Dónde más se puede comer churros en el centro? A un paso de nuestras dos últimas paradas: en el entorno del Mercado Central, en la Circunvalación Ulpiano Díaz, entre pubs y locales de ocio nocturno, sobreviven dos gigantes de los churros almerienses.

Por una parte, Habibi continúa en su rincón de siempre y con el constante ir y venir de almerienses que desayunan churros entre la algarabía del Mercado. En otra de las esquinas de este histórico edificio se encuentra una churrería de la que ya hablamos en la primera entrega de este paseo: El Sevillano no solo ofrece churros en su kiosco de la Plaza Gaudí, sino que también está presente en el centro de la ciudad.

Y antes de abandonar las calles del centro, una parada imprescindible: en la Avenida de la Estación se encuentra Torres Bermejas, última parada de muchas fiestas (y primer punto del día para muchos desayunos). Sus churros son, probablemente, de los mejores de toda la ciudad.

Un par de barrios

Pero, tal y como mostró ‘La Foodineta’ en la primera entrega de esta ruta churrera, no solo de bares céntricos vive el almeriense. Por eso arrancamos para ir a otros rincones de la ciudad.

¿Dónde comer churros si estamos en Los Ángeles? Hay varias opciones, pero una de las más transitadas es la de la cafetería Princesa, situada en la calle Lopán. 

Y, en el extremo opuesto al barrio de Los Ángeles, El Zapillo también cuenta con un rincón lleno de sabor a barrio y con churros entre su oferta gastronómica: se trata del Kiosco Rosita, en la Plaza de El Zapillo, entre la Avenida Cabo de Gata y la calle Villaricos. 

Bonus track 

La calle Magallanes del Alquián número 4 es la parada final de nuestra ruta. El tesoro de los churros más allá de las calles de Almería, ya en el extrarradio: si bien Isabel Simón, Escudo de Oro de la ciudad de Almería, falleció en 2021, la churrería familiar sigue cocinando unos de los mejores churros de Almería. La tradición y el sabor bien valen un viaje hasta este rincón de la ciudad.

¿Y tú? ¿A qué churrería nos llevas?