“Es el momento de Almería: van a ser los 4 mejores años de su historia reciente“

Javier Aureliano García (PP) afronta su segundo mandato como presidente de la Diputación con renovada energía, hasta el punto de que plantea para los próximos cuatro años la acometida de una revolución en la provincia sobre la base del orgullo de ser almeriense. A sus 46 años le avala la sólida experiencia de gestión en la casa de dos mandatos como vicepresidente y cuatro como máximo dirigente. Ahora acaba de conseguir el mejor resultado de su partido -del que además es presidente provincial- de la historia.

¿Esperaba los resultados del 28-M, cree que el PP ha tocado techo?

No, creíamos que ya se había tocado techo en 2011. Ahora es verdad que hemos tenido el mejor resultado del Partido Popular en España. Y no solo del PP, sino  de cualquier partido político en cualquier provincia: ninguno ha sacado nunca el 48,25% de los votos. 

¿Estamos contentos? Sí. ¿Y significa que como hemos tocado techo ya no vamos a seguir trabajando? No, porque ahora tenemos una gran responsabilidad, que es mantener tanta confianza depositada en nosotros por los almerienses, e intentar ganarnos a quienes no han elegido la papeleta del PP. Nuestro objetivo es que cuanto más gente confíe en nosotros, mucho mejor, porque querrá decir que estamos haciendo bien las cosas.

¿Por qué una revolución ahora, tras 12 años al frente de la Diputación?

Los tiempos van cambiando y tenemos que adaptarnos. Hemos pasado una pandemia que nos zarandeó el mundo, nos hemos tenido que adaptar a sus procesos y restricciones. Ahora llega el momento de revolucionar la provincia de Almería, tenemos que hacer la revolución del agua, de las infraestructuras, de la cultura, del patrimonio, en definitiva la revolución del orgullo de ser almeriense. 

Tenemos todos los indicadores de frente, y nadie nos ha regalado nada. Los almerienses hemos sido capaces de avanzar con firmeza a pesar de estar orillados en una esquinita de la península, y de que las administraciones no nos hayan hecho caso nunca. Ahora llega el momento de decir: "oiga aquí estamos, lo que hemos conseguido ha sido solo gracias a nosotros".  Es el momento de Almería y estoy convencido de que los próximos cuatro años van a ser los mejores de su historia reciente.

¿Cómo es el equipo con el que afrontará esa revolución?

El equipo ha cambiado, ha entrado gente nueva, con más o menos experiencia, pero han entrado en definitiva los mejores. Cada uno de ellos tiene una hoja de ruta que les he dictado, y todos en conjunto vamos a trabajar en equipo para intentar llevar a cabo esa modernización y revolución en la provincia. Tengo las mejores personas para hacerlo y estoy convencido de su valía. Unos cuentan con veteranía, otros con impulso aunque no tengan tanta experiencia, pero también serán claves. Unos están en la oposición, otros en el gobierno... en definitiva ha sido un encaje muy importante, muy meditado, muy pensado. 

Usted siempre ha destacado sus esfuerzos por luchar contra la despoblación. ¿Qué medidas va a tomar en su nuevo mandato al respecto?

Tenemos que partir de una foto fija: nos encontramos con una Diputación Provincial con un éxodo masivo a las grandes urbes y zonas costeras. Hemos intentado pararlo un poco, y lo hemos hecho, lo hemos contenido, aunque sigue existiendo. La Diputación tiene que ser el dique de contención del éxodo rural, tenemos que ser los que vertebren ese territorio. Ahora mismo hemos conseguido que el 70% de los municipios de Almería estén creciendo en población, o al menos no disminuyen. Eso no pasa en otras provincias ¿Que quiere decir esto? Pues que tratamos de llevar servicios a los municipios. No se puede obligar a nadie a que viva en un pueblo, pero tampoco se puede sentir nadie obligado a vivir en una ciudad, por tanto si decides residir en una ciudad que sea porque quieres, pero no  porque en el pueblo no estén disponibles sus servicios y oportunidades.

Por tanto, nuestro objetivo es seguir llevando a los municipios, por muy pequeños que sean, los servicios de la ciudad. Por eso nos comprometimos hace cuatro años a que Almería estuviera fuera de la exclusión financiera, y lo está. Nos comprometimos a seguir invirtiendo en los municipios más pequeños en infraestructuras, y hoy por hoy la provincia tiene el despliegue de fibra óptica más grande que Londres, porque no solo hay que conectar territorios sino también personas. Y eso lo está haciendo la Diputación. 

Ahora nos hemos comprometido a seguir avanzando en llevar servicios deportivos, culturales, sociales a los municipios y  en restauración de patrimonio, material e inmaterial. 

También ha anunciado un plan para que los pueblos pequeños puedan tener bar.

Sí, es algo muy importante, entendemos que un municipio sin bar se queda cojo, y para nosotros es clave tener uno, y una tienda, porque el bar es el centro neurálgico, el punto de encuentro de los vecinos para departir de cómo le ha ido la jornada, y es también el punto de parada de un visitante, para tomar un café una cerveza o para comer. Es clave que haya un bar en el pueblo y tenemos que incentivar estos servicios de restauración en los municipios, nos hemos comprometido a que en estos cuatro años cada pueblo de Almería al menos va a tener un bar. 

Algo que sucederá pronto en Benitagla, como ha informado este periódico

En Benitagla ya estamos construyendo un bar, en el antiguo Ayuntamiento. De hecho va a ser el primero que vamos a inaugurar en este nuevo plan, en el municipio más pequeño, de 53 habitantes. Pero como Benitagla tienen que ser todos los municipios de Almería. Y para eso tiene que estar la Diputación, porque un bar es un servicio social, y no estamos hablando de rentabilidad. Sucede como con los cajeros automáticos, que nos están dando déficit, pero los estamos pagando porque es un servicio que tenemos que prestar.

Igual sucede con las tiendas: nadie debe tener que ir a comprar al pueblo de al lado o a cinco pueblos más allá porque no hay una tienda en 10 kilómetros a la redonda. Eso no lo vamos a permitir.

Otra de las bases de su revolución será el agua...¿Puede garantizar que este verano no habrá restricciones en la provincia?

No, eso no lo puede garantizar nadie, pero todos los pueblos de la provincia de Almería tienen hoy agua potable gracias a la Diputación, a pesar de que cuando llegamos 53 municipios no la tenían. 

¿Quiere esto decir que tenemos suficiente agua para abastecer a toda la provincia? No lo sabemos, por eso nuestro trabajo tiene que seguir invirtiendo en infraestructuras hidráulicas, que garanticen el suministro en los picos de población que podamos tener, y sobre todo que no haya cortes. También podemos presumir de que hoy por hoy no hay cortes de suministro, pese a que somos una provincia muy árida, la más árida de toda Europa. Esto quiere decir que sabemos aprovechar el agua y que hemos hecho las infraestructuras necesarias. 

¿Falta mucho por hacer? 

Muchísimo, no se puede imaginar, y por eso ésta tiene que ser también la legislatura del agua. Para nosotros, si no tenemos agua da igual que hablemos de patrimonio, de bares, de tiendas, da igual, porque si no hay agua no hay nada, y por eso será nuestra principal prioridad. Será racionalizarla muchísimo mejor, aprovechar mejor cada gota, cada recurso hídrico, tanto superficial como en pozos, en trasvases o de desalación. 

Sigue siendo entonces una prioridad básica.

Sí, todas las políticas de la Diputación van a ser de forma trasversal para dos cosas: para mantener y traer agua y para luchar contra la despoblación, todas las áreas de la Diputación van a girar en torno a eso, incluso hasta la de Igualdad.

Hemos pasado ya la tercera ola de calor del verano. ¿Trabaja la Diputación en la climatización de espacios públicos?

La Diputación es un ayuntamiento de ayuntamientos y damos inversiones a los municipios para que trabajen en la climatización. De momento, ningún municipio se nos ha quejado de su falta. Estamos invirtiendo en muchos municipios, en teatros y edificios públicos. La próxima inversión va a ser en Los Gallardos, donde su teatro municipal no tiene climatización y las están pasando canutas para poder representar una obra, y nosotros vamos a climatizarlo, como estamos haciendo en otras instalaciones culturales, deportivas, etcétera.

¿Esto encaja con el ahorro de energía?

Hemos bajado un 70% la huella de carbono, porque ya hemos cambiado el 80% de las luminarias públicas de la provincia. Eso significa que hemos reducido en un 70% el consumo de energía pública en iluminación de espacios y edificios públicos. La provincia consume hoy un 70% menos que hace cuatro años. Queremos llegar al 100% de los espacios públicos y bajar esa huella de carbono y ese consumo, porque tenemos que hacer una provincia mucho más sostenible, más eficiente y eficaz en el uso de los recursos energéticos. Los almerienses siempre lo hemos hecho así, hemos aprovechado y racionalizado al máximo todos los recursos que nos ha dado la naturaleza. Y por eso tenemos que intentar que el consumo energético en nuestra provincia sea ejemplar en Europa. 

Otra pata de su revolución es el patrimonio. ¿Cómo va el proyecto de restauración del Cortijo del Fraile?

Estamos muy contentos con él, la Junta nos ha autorizado a actuar en este bien de interés cultural. Ahora vamos a hacer la primera introducción, que es sostenerlo y apuntalarlo para que no se caiga, como hicimos con el Hospital Provincial, y preservarlo todo lo posible. Una vez que tengamos eso hecho acometeremos el proyecto, que será muy amplio, abierto, en el que la sociedad podrá participar y con el que, como tenemos las ideas muy claras y sabemos exactamente lo que vamos a hacer, está todo el mundo encantado. 

Porque además no solo tenemos el edificio, sino otras 30 hectáreas alrededor donde queremos hacer, con el epicentro  en el Cortijo del Fraile, un entorno cultural para festivales de todo tipo, de poesía, flamenco, música, de proyecciones, que también siga siendo fuente de inspiración para artistas, que tenga un gran restaurante.

Mi ilusión sería que una de las mejores compañías de teatro del mundo pudiera representar allí una vez al año 'Bodas de sangre'. Que personas de Almería y de todo el mundo puedan venir a ver representada esta obra de fama internacional en el lugar donde sucedieron los hechos y que inspiró a García Lorca. Va a ser una cosa única en el mundo y es uno de los sueños que me gustaría ver cumplido.

¿Tienen plazo para comenzar las obras?

No, porque no sabemos cómo lo vamos a encontrar todo. Lo importante es que vamos a arrancar.  Cuando hablamos de un edificio del que desconocemos sus condiciones no me atrevo a decir una fecha, porque no sé lo que me voy a encontrar, ni qué me van a decir los arquitectos. 

¿Y para la inauguración del Museo del Realismo sí hay fecha?

Sí, este año, en el último trimestre.

¿Se está preparando algo especial para su estreno?

Va a ser el centro museístico más importante del sudeste español. Puedo anunciar que en el claustro del Hospital Provincial va a estar la primera y única escultura a tamaño real de los reyes de España hecha por Antonio López. Ya se está terminando esa obra, con el conocimiento de la casa real. Yo personalmente he podido hablar con su majestad el rey, de la escultura y de lo que es el museo del realismo. Y ya se está amueblando el edificio, a falta conectar la climatización. 

La mejora de las comunicaciones son otro de sus caballos de batalla. ¿Cuándo podremos recuperar los vuelos existentes antes del covid?

Llevábamos un ritmo muy importante hasta que llegó la pandemia. Cuando entramos a la Diputación había siete vuelos internacionales y cuando llegó el covid teníamos programados 127 a la semana. Luego tuvimos que empezar de nuevo de cero, lo que no es fácil. Estamos trabajando para llegar a datos prepandémicos. En cualquier caso, nunca habíamos tenido un vuelo directo con París o con Milán que no fueran chárter, y ya los tenemos.

Si los aviones no van bien, el tren y el AVE...

Yo tengo muy pocas esperanzas, si esto sigue así, de que el AVE esté aquí el año 26. Y lo digo antes -la entrevista se realizó la pasada semana- de que gobierne un partido u otro. No me creo el ritmo de las obras que ha mantenido el Partido Socialista, y si sigue ya digo que no va a estar el año 26. Y si está el Partido Popular, intentaremos que esté ese año, pero será muy complicado, por el cronograma de obras que ha llevado el PSOE.

Pero al menos tendremos soterramiento.

Sí, tenemos la buena noticia del soterramiento, que se ha aprobado, y eso es importante, henos visto como la Junta ha puesto tres veces más del dinero que le correspondía, que el Ayuntamiento se ha echado para adelante, y cómo al final se ha aprobado algo que se tenía que haber hecho mucho antes. Esos retrasos se van acumulando uno tras otro, ojalá el tren esté aquí el año 26. Desde luego, nosotros vamos a seguir empujando y la Diputación va a ser una de las administraciones que más exija, al margen de quien gobierne en Madrid. Mi vehemencia para exigir infraestructuras al Gobierno de España o la Junta va a ser exactamente igual.

¿Y para cuándo las cercanías al Poniente y al Andarax?

Nunca vamos a rechazar infraestructuras que sean necesarias, y el tren con el Poniente almeriense es clave, fundamental, porque en esta comarca viven en torno a 300.000 habitantes, y por tanto hay que conectarlos con la capital y el Bajo Andarax. Estamos hablando de que casi el 70% de la población de la provincia vive entre la zona metropolitana de Almería y el Poniente. Y por tanto estas zonas tienen que tener una conexión clara al margen de la carretera. 

¿Estas infraestructuras van a ser apoyadas también por la Junta?

Hace poco me decía Juanma Moreno que las inversiones del futuro se iban a centrar mucho en la movilidad sostenible. Una autovía no puede sostener el ritmo de coches y el crecimiento de vehículos, por la contaminación y porque por muchas autovías que hagas siempre va a haber atascos. Y en el Poniente almeriense pasa eso, estamos luchando por un tercer carril de la A-7, que es fundamental y necesario, pero que dentro de 20 años se va a quedar pequeño. Al final, tienes que tener una alternativa de movilidad que sea sostenible. Si cae una piedra o hay un accidente en la autovía, el Poniente está incomunicado, no puedes ir a él a no ser que subas por la Alpujarra, y eso no lo podemos permitir. Necesitamos tren de cercanías, no solo con el Poniente sino con el Bajo Andarax, y por eso vamos a luchar, pero paso a paso.

¿Tendremos autovías de pago en la provincia el año que viene?

Me gustaría que no lo fueran, pero según lo que Pedro Sánchez ha presentado a Bruselas es que lo vamos a tener, y estamos bastante preocupados porque esto sea así. Porque es lo que faltaría, que además del precio de la gasolina tengas que pagar para ir a trabajar. No nos parece acertado, y por eso intentaremos revertir esa situación. 

Después de 12 años de trabajo en la institución ¿cuál cree que es la percepción de la población respecto a la Diputación?

Lo más importante es que cada vez más los ciudadanos se sienten identificados con la administración más prestigiosa y que más les representa, y que cada vez la veamos como una institución de todos, no porque esté gobernada por el PP, sino porque seamos una corporación de 27 diputados y que todos empujemos a la vez. Nosotros tenemos mayoría absoluta, pero vamos a gobernar como si no la tuviéramos, vamos a aceptar todas las iniciativas sin mirar colores políticos si son buenas para la provincia.

¿Se ha marcado un plazo para dejar la institución?

Nunca me he marcado ningún plazo. Donde he estado he intentado siempre dejarme la vida por hacer todo lo posible para cumplir con la obligación del cargo. Y ahora mismo tengo un contrato de cuatro años con los almerienses y voy a cumplirlo. Cuando termine ya hablaremos, pero ahora mismo estoy entregado al cien por cien a una provincia que me tiene locamente enamorado, que es Almería.