Quique González: “Volver a Almería para tocar ‘Salitre 48’ es muy emocionante”

Quique González (Madrid, 1973) está contento y agradecido. Dos sentimientos que se deslizarán varias veces durante la charla que mantiene con LA VOZ con motivo de su próximo concierto en Almería: el sábado 16 de marzo a las 22 horas en la sala Berlín Social Club.

“Creo que es la mejor gira que he hecho en mi vida, está siendo de diez. Tengo la sensación de que todas las cosas están en su sitio”, comienza diciendo al otro lado del teléfono. La gira, con la que anda brindando por sus 25 años de carrera, comenzó en Vitoria el pasado octubre y concluirá en Madrid en abril. “Vuelvo a casa todos los fines de semana con mucha alegría y emoción por el cariño que estamos recibiendo”, afirma. Y subraya la enorme “química” que hay con sus músicos, con su equipo y con el público. “Me pone muy feliz, de verdad”. 

El arte de ‘Salitre 48’
En la Berlín, Quique volverá a ‘Salitre 48’, su segundo trabajo. Un punto de inflexión en su incipiente carrera que quedó fundido para siempre con el paisaje almeriense. De ahí que la elección para el concierto del sábado sea tan cristalina como el azul del Cabo de Gata. “Allí hicimos el arte de ‘Salitre 48’, todas las fotos, y también rodamos un videoclip”, desgrana.

Aquella sesión de fotos, recuerda el periodista Chema Doménech en ‘Salitre 48. Quique González en el disparadero’, libro sobre la gestación del disco, se realizó en marzo de 2001, hace ahora 23 años. Tras la cámara, Fernando Maquieira. “Fueron pocos días, no paramos de trabajar, pero nos lo pasamos de maravilla, nos reímos muchísimo y nos quedamos maravillados con el paisaje”, cuenta. No era su primera visita al Parque Natural, aunque nunca había llegado a “conocerlo tan bien”. Y prosigue: “Me enamoré del lugar en aquel momento. Siempre pienso cuándo va a ser la próxima vez que pueda ir de vacaciones o a escribir canciones de nuevo”.

Una de ellas, ‘La casa de mis padres’ (“mi canción favorita de mi repertorio”, apunta), la terminó de escribir en mayo de 2015 en la Cala del Plomo. “Cabo de Gata es inspirador para mí, así que volver a Almería para tocar este disco es muy emocionante”. 

El álbum, además del corte que lo bautiza, todo un himno, alberga ‘La ciudad del viento’, ‘De haberlo sabido’, ‘Ayer quemé mi casa’ y ‘Rompeolas’. Pero curiosamente, pese al título marinero y a las imágenes del Cabo, ‘Salitre 48’ hace mención a su dirección de entonces en el madrileño barrio de Embajadores. “Sí, es paradójico. El nombre de una calle de Madrid, un ambiente totalmente urbano, para un disco muy viajero: escribí temas en el norte, en Cádiz, en Cadaqués... Es un disco viajero y mediterráneo”. 

Reencuentros
El primer concierto de Quique González en Almería fue en El Zaguán. La hemeroteca no registra el cuándo. “Ya sabes, en los comienzos estás en la trinchera, es como comenzar a escalar una montaña. Tocas en un ambiente casi familiar, de amigos”.

Ahora disfruta de ver cómo el público ha ido creciendo junto a él. “Muy de dos en dos, por el boca a oreja, gracias a la fidelidad y a la insistencia, a mi cabezonería también, en mis canciones”, reflexiona. 

De ahí que “de las cosas más bonitas” de esta gira sean los reencuentros. “Hay gente que llevaba tiempo sin ver, parejas que se conocieron hace 20 años y ahora vienen con sus hijos, personas que he conocido en conciertos y luego se han convertido en amigos y amigas. Es otro de los regalos de este oficio: la sensación de que sigo manteniendo un diálogo con ellos a través de mis canciones”.