En el corazón de su Almería, en plena Plaza Vieja. Ante dos mil personas que coreaban su nombre. Y con un emotivo recuerdo a su padre, que nació en un casa muy cercana al lugar. Así comenzó el majestuoso espectáculo que David Bisbal ofreció el domingo en un escenario único y ante su público, su gente. Con la Alcazaba de testigo, ‘Almería tierra noble’ supuso el pistoletazo de salida del concierto acústico número 103 de una gira que está llenando escenarios allá por donde va.
David compuso un cóctel perfecto. Especial. Un viaje musical por el panorama hispano que recorría las décadas de los cincuenta, sesenta, setenta y ochenta. Canciones de algunos de sus más idolatrados artistas, como Alejandro Sanz, Joan Manuel Serrat o Alberto Cortez. Todo ello, intercalado con gotas de algunos de sus mejores éxitos, como ‘Ave María’, ‘Quién me iba a decir’ o ‘Dígale’.
“Qué emocionante es estar aquí, en un escenario como este, la Plaza Vieja. Gracias al Ayuntamiento de Almería por permitirnos esta gran noche”, comentó Bisbal, que se mostró encantado por el aspecto que lució un lugar tan emblemático. Se trataba de un Bisbal elegante, con traje negro y camisa blanca, emotivo, agradecido, entregado.
Un Bisbal mágico
Fue un concierto íntimo, que estableció un contacto muy especial entre el artista almeriense y el público. En todo momento, David Bisbal se mostró muy cercano a los fans que se encontraban sentados en las dos mil sillas que abarrotaron la Plaza Vieja. Unos asientos que dejaron de ser ocupados por los asistentes en la canción ‘24 horas’, ya que el propio Bisbal invitó al público a ponerse en pie para bailar al son de su música. Los presentes no le defraudaron y se entregaron a un momento cumbre de la velada.
El cóctel musical
‘Te quiero dijiste’, de la mexicana María Grever, fue la primera parada en el recorrido por las décadas de entre los cincuenta y ochenta. Cuando ya se había creado un clima romántico y más íntimo, recordó a uno de sus compositores argentinos favoritos, Alberto Cortez, interpretando su canción ‘En un rincón del alma’.
Bisbal no quiso olvidar a un gran amigo, Alejandro Sanz, y se atrevió, con el sonido acústico de su querida banda y su personalidad propia, con la canción ‘Adoro’ del artista madrileño.
De entre sus éxitos, ‘Al Andalus’, que dedicó a toda Andalucía, provocó una auténtica revolución y los dos mil asistentes la corearon de forma incansable. También ‘Ave María’, ‘Dígale’, ‘Quién me iba a decir’, ‘Esta ausencia’ o ‘Por ti’ formaron un repertorio que, entre otras canciones, hicieron disfrutar de forma inolvidable a los presentes. Pero, sin duda, uno de los momentos más emotivos para el cantante fue cuando dio paso a la canción ‘Mi princesa’, que sirvió para recordar a su hija Ella.
Fue una noche perfecta, en un escenario único y con el artista más internacional del que toda Almería presume.
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