“Los programas informativos son la seña de identidad de una televisión pública”

Canal Sur Televisión empezó sus emisiones en las ocho provincias andaluzas un 28 de febrero de hace 25 años. Su director en Almería, el periodista Antonio Torres Flores (Los Gallardos, 1954), repasa este cuarto de siglo en el que, una vez superado el estigma de ‘Tele Sevilla’, han reforzado las señas de identidad de la provincia y contado los hechos más significativos de su historia reciente.

Uno de los hitos más destacados de la trayectoria de la televisión autonómica se produjo, a su juicio, cuando empezaron las desconexiones territoriales en 1997. “El estigma de ‘Tele Sevilla’ viene del programa ‘Telesur’ de Televisión Española, que daba más información del Betis que de Almería y Cádiz juntas. Los espectadores veían eso mal y las desconexiones fueron la mejor medicina. El mismo tiempo de información en todas las provincias”, explica.

Doctor en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y autor de libros como ‘Soñar la radio’, ‘Mujeres de palabra’ y ‘Los primeros ojos de Andalucía’, Torres señala los sucesos racistas de El Ejido como una de las coberturas informativas en las que el equipo de RTVA dio muestra de su madurez profesional.

“La huelga de Pescadería de principios de los 90 o la elección de Almería como sede de los Juegos Mediterráneos en Túnez’99 han sido igualmente relevantes”, indica.

A lo largo de estos 25 años, los almerienses también pudieron seguir a través de Canal Sur acontecimientos claves para el desarrollo de su tierra como la ordenación de la Rambla o la creación de la Universidad de Almería. “El apoyo a artistas de aquí como Bisbal, Tomatito y Niño Josele también ha constituido parte de nuestra labor”, apunta.

Pioneros
La primera delegada de Canal Sur Televisión en la provincia fue Beatriz Senosiáin. A ella le siguió José Luis Masegosa y, en 1994, Antonio Torres unificó esta función con la de director de Canal Sur Radio. Almería y Huelva fueron las primeras en apostar por este modelo que hoy se ha extendido.

En sus inicios, RTVA compartió sede con una productora de los Edificios Mediterráneo. De allí se fueron a Oliveros y luego dieron el gran salto del analógico al digital y se mudaron a sus modernas instalaciones de la calle de la Pilarica. “Conseguirlas fue una tarea muy difícil porque al principio hubo reticencias. Teníamos ofertas para irnos a Roquetas, Huércal de Almería y Viator. Y estuvimos a punto, pero en última instancia llegamos a un acuerdo con el Ayuntamiento de la capital”, manifiesta.

Reforzar las señas de identidad y que Almería sea conocida en Huelva y Huelva en Almería están entre las razones de ser de la cadena. “También hay que evitar el centralismo almeriense y no sólo ir a los pueblos cuando está el suceso. Hay que enseñar las cosas buenas y no sólo el suceso trágico y la España negra”.

Para este comunicador de raza, la receta de un cuarto de siglo de éxitos es bien sencilla: “La seña de identidad de una televisión pública son los programas informativos”. “Criterio y un periodismo bien hecho constituyen el principal valor de los cámaras, periodistas y técnicos que narran el día a día de los andaluces”, añade convencido.

Con estos ingredientes, el futuro de la televisión y del periodismo es menos incierto. “El futuro de la televisión es estar en el móvil. En la radio se ha conseguido y en la tele e