Talento literario y fotográfico en el Instituto Provincial de Educación Permanente

La vocación puede despertar a cualquier edad y resulta clave que, en el momento en que se manifieste, la persona reciba la orientación oportuna para cultivar ese talento innato, en especial si se trata de un niño o un joven todavía con toda la vida por delante para abrirse camino y labrarse un futuro. 

El equipo docente del Instituto Provincial de Educación Permanente (IPEP) de Almería ha celebrado un certamen literario -con las subcategorías de microrrelato y poesía- y fotográfico entre sus alumnos. Y el resultado obtenido no ha podido ser más revelador. 

Según la vicedirectora del IPEP, Heraclia Castellón, el concurso estaba abierto a los estudiantes matriculados en cualquier curso que, dadas las características del centro, son adultos mayores de 18 años. “El hecho de que cuenten con un bagaje personal de lecturas y experiencias ha enriquecido los trabajos y ha permitido que ofrezcan un considerable nivel. Los participantes cursan Bachillerato y el Acceso a la Universidad para Mayores de 25 años”, apunta.

Más allá de la calidad, los trabajos presentados tienen la particularidad de estar ambientados en Almería, al menos algunos de ellos. Es el caso de ‘Cecilia’, de Irene Martínez Escámez, ganador en la modalidad de microrrelato y centrado en el Cortijo Fischer, ubicado en las inmediaciones del centro. “La narración da forma de ficción a los sucesos ligados al edificio y sus primeros propietarios en un relato de corte muy ‘becqueriano’. La autora lo concluye con otro suceso real, los pasados temporales que arrancaron un algarrobo centenario del jardín del IPEP”, indica Castellón.

El segundo premio de microrrelato -‘Brisa de verano entre los arboles’, de Pablo León Torres Panzo- incluye una brillante presentación. 

Mientras, los galardones de poesía -Pilar Enríquez Montes por ‘Efímero lo eterno’ y José Antonio Galera Sánchez por ‘Discontinuidad inevitable de salto infinito’- son dos voces personales que buscan crear un universo propio. 

Por último,  las dos fotos ganadoras -Pilar Martínez Soria y Alejandro Jesús García Sánchez- captan la actividad diaria del centro y su entorno.

 “Ha sido la primera convocatoria y esperamos continuar. Nos ha sorprendido descubrir que nuestro alumnado cultiva el gusto por la creación”, concluye.

TRABAJOS GANADORES

SECCIÓN MICRORRELATO

Cecilia

Irene Martínez Escámez

Cecilia no murió a consecuencia de la caída de un caballo como hicieron creer. Falleció en su lecho, marchita, como una flor cortada.

Cada mañana salía y galopaba hasta que el viento le arrebataba una lágrima, sintiendo el frenesí de la libertad bajo sus caderas, dejando a su paso una estela de rosas y entregándose como nunca se hubiera atrevido a hacerlo con otro ser de este mundo.

Una cálida mañana de primavera, mientras Cecilia calzaba sus botas, su corcel se hallaba bajo al árbol que presidía la entrada a la casa, esperándola pacientemente, con su grupa escupiendo destellos de fuego y arco-iris.

Federico salió, y ahí estaba él, orgulloso, elegante, majestuoso. Caminó a su alrededor, observándolo minuciosamente. Se sintió peque&nti