La Feria se despide en el club de Orozco

Una barra de bar al fondo, lámparas repartidas a pie de escenario y un luminoso con letras de neón con el título de su gira ‘Ozean’s club’. El último concierto de la #FeriadeAlmeria ha sido una invitación de Antonio Orozco a vivir más de dos horas de buena música, emociones, bailar, amar, saltar, disfrutar y hasta tener un gesto solidario. 120 minutos ambientados en un club, donde ha destilado el cantante más de una veintena de composiciones, en las que refleja su sensibilidad y cuidada prosa, lo que no implica que la actuación esté exenta de ritmo. Todo lo contrario…

Durante más de hora y media el artista no para de animar a soltarnos el pelo: “¡Almería, todos a bailar y saltar!”, repitió en varias ocasiones, seguido con una explosión de alegría por sus incondicionales. Y tras el bullicio, deja los últimos veinte minutos para realizar un acústico, sentado y guitarra en mano, mientras, de manera original, van desmontando el escenario.

Comenzó fuerte, con el tema ‘Temblando’ y a partir de ahí se han sucedido algunos de sus composiciones más conocidas, tales como ‘Llegará’, ‘Eres’, ‘Será’ o ‘Aire’. El público se sabe ‘a pie juntillas’ sus temas y así coreó al unísono ‘Devuélveme la vida’.

A este artista le gusta el diálogo con el público y antes de comenzar ciertas canciones explicó los motivos que le han impulsado a crearlas, frases que te hacen pensar, poesía con música: “Todo el mundo se merece una segunda oportunidad”, afirma sobre el escenario, a la vez que en otro momento manifiesta que “las canciones, cuando se terminan, dejan de pertenecerte y forma parte de la vida de cada uno de vosotros, de vuestra historia”, y más adelante suelta una frase convertida en himno en las redes sociales: “es más bonito decir te quiero que tener que imaginarlo”.

Durante el concierto Antonio Orozco ha realizado una demostración de poderío con su carismática voz, una voz rota e intensa, acompañada de una formación clásica integrada por dos guitarras, teclados, bajo, batería y percusión. A lo largo de las más de dos horas, se ha podido disfrutar de los diferentes registros de Orozco, ya sea para recitar la poesía de sus baladas, o para imprimirle carácter a los temas más rockeros, y en todo momento ha conseguido la deseada química con los almerienses. 

Se trata de un cantante de raza, al que le gusta el contacto, y por eso, a mitad de concierto, decidió bajarse del escenario y cantar junto al público, codo con codo, como si estuviera con unos amigos, para regocijo de todos los presentes que han inmortalizado en sus móviles el momento.

Pero Antonio Orozco, además de excelente de cantante y compositor, es sobre todo buena persona, y ha tenido el acierto de sumar a cada concierto la faceta solidaria de apoyo al Hospital Infantil San Juan de Dios.

Un regalo para su público
Y cuando ya llevábamos más de hora y media, cuando ya había realizado un bis, cuando salía por la puerta, se lo piensa, regresa, coge la guitarra española y realiza otro concierto, un recital acústico de veinte minutos, que concluyó con un emotivo ‘Estoy hecho de pedacitos de ti’. Un intenso concierto, como lo es Antonio Orozco, como traca final de la #feriadeAlmeria, y nada mejor que festejarlo en el club de Orozco.