Los caminos de PP, PSOE y Podemos se cruzaron ayer en Madrid

Los tres actos celebrados ayer en Madrid conforman la geometría politica por la que transitará el futuro de los tres principales partidos del arco parlamentario. PP, PSOE y Pod

Pedro Manuel de La Cruz
01:00 • 12 feb. 2017

Rajoy, por fin libre


Después de años de incomodidad asfixiante por el acoso indisimulado de Aznar y el derribo pretendido por Aguirre, Rajoy ha conseguido lo que tanto ha buscado desde aquel congreso de 2008 en Valencia en que Aznar le sometió a la humillación del desdén. El presidente que sostuvo el dedo que lo eligió va camino del esperpento y su sombra se acabará, más pronto que tarde, diluida en la nada de la indiferencia. 
Rajoy nunca lo contará en unas Memorias- joder, que pereza chico, dirá el día que le propongan escribirlas- pero el ex presidente ha sido, durante todos estos años, una pesadilla (casi) imposible de soportar desde la oposición, tras los triunfos de Zapatero, y hasta después de las victorias del PP en 2011, 2015 y 2016.
En el congreso que hoy culmina en la Caja Mágica, Rajoy ha acabado con su mayor enemigo dentro del PP. Aznar ya es pasado y el aznarismo un reducto para nostálgicos del poder perdido.
La política cumple con milimétrica perfección aquel título de la película de Agustín García Yanes en el que se aseguraba que “nadie hablaría de nosotras cuando hayamos muerto”. Cuando Aznar decidió que su sucesor fuese Mariano Rajoy nunca pensó que la película de Yanes fuera a afectarle a él. Tan convencido estaba de su trascendencia que ya apareció vestido de Cid Campeador en una foto que, más que estampa, es una radiografía del alma, disparada por Luis Magán para El País Semanal en 1987. 
De aquel Cid de opereta- busquen la imagen en internet, se van a reír, de veras- han pasado treinta años y el expresidente habrá comprobado este fin de semana que, no solo nadie gana batallas después de muerto, sino que, además, nadie está en condiciones de darlas cuando ya ha perdido el poder de escribir en el BOE el futuro de los que le rodeaban.
Hoy el PP está con Rajoy- como ayer estuvo con Aznar-porque tiene el poder y, los mismos que asumían como probable (y me atrevería decir que como deseable) su abandono tras el fracaso del 20 D tras la pérdida de más de sesenta escaños, serán esta mañana sus seguidores más enfervorizados.
Como escribió Heráclito “todo fluye; todo cambia; nada permanece”. La política es un río en el que, cuando doblas un recodo, nadie puede volver atrás. Aznar quiso permanecer nadando y volver atrás y, al final, ha acabado anegado por la corriente.
Una corriente que, rio abajo y hasta llegar al congreso provincial del PP, también puede acabar con la placentera travesía de algunos militantes del PP que maniobran en la oscuridad para suceder a Gabriel Amat.
Mientras Amat quiera y salvo contratiempos personales imprevistos, quien intente escribirle el guión del futuro del PP en Almería estará transitando por un pantano en el que acabará anegado. Su vinculación con Rajoy y, desde hace unos meses, con Cospedal a través de llamadas y encuentros privados, le hace invulnerable. Después de la lluvia caída en los últimos meses Amat sigue sin estar mojado.


El PSOE mira a Susana




Lo sucedido ayer en el salón de actos de la Fundación Once es un fiel reflejo de la tormenta por la que atraviesan los socialistas. En una acertada estrategia marketiniana para contrarrestar el impacto mediático de los congresos de PP y Podemos, el alcalde de Vigo y presidente de los Municipios y Provincias españoles (FEMP), convocó a alcaldes y concejales socialistas para exhibir musculatura política y ocupar espacios mediáticos. Nada que objetar. 
En política no hay que dejar espacios libres y, con esta convocatoria, la pretensión de Iglesias de hacer coincidir los congresos de PP y Podemos en el mismo día y a la misma hora para que la “gente” (como le gusta decir a él) visualizara el gobierno y su alternativa no ha sido exitosa.
Lo que no pasa desapercibido (ente otras cosas porque los promotores y asistentes al acto pretendían todo lo contrario), es el protagonismo de Susana Díaz en esa convocatoria. Su obstinada decisión para no hacer pública la aspiración a liderar el PSOE- ayer tampoco lo hizo- hacía, aparentemente innecesario, su exclusivo protagonismo. 
Pero las cosas no son lo que aparentan. Detrás del acto de ayer está la consolidación de la presidenta andaluza como aspirante a liderar el PSOE. Después de la aclamación de centenares de alcaldes y concejales ya no hay, no tiene vuelta atrás.
Nadie en su entorno lo dice y en Almería quienes están cercanos a ella guardan un silencio sepulcral, pero todos saben que su presencia en la carrera está asegurada. El baño de masas de ayer es el disparo inicial del maratón que habrá de llevarle a la hora de la verdad de enfrentarse con Patxi Lopez y Pedro Sánchez. Nadie sale en procesión si no aspira a la santidad. En Almería los cofrades de la presidenta andaluza no muestran ninguna inquietud por los nazarenos que acompañarán a Pedro Sánchez y a Patxi López en esta larguísima estación de penitencia; salvo en la capital, donde los críticos tienen asegurada la cosecha de algunos centenares de votos. La melancolía por los tiempos y el poder perdidos nunca des cansa.  


Podemos: del adanismo al cainismo




Podemos cierra hoy su semana trágica. Aquel partido adanista que creyó descubrir el mundo cada mañana ha acabado convirtiendo aquel jardín del edén donde solo había fraternidad, sonrisas, besos y océanos de cursilería en un campo de batalla en el que el cainismo se hizo carne y habitó entre ellos.
Me lo dijo hace dos años uno de los periodistas madrileños que más cerca está y más sabe de su estructura: Pedro, que nadie se confunda. Podemos son 22 amigos (te puedo dar los nombres uno a uno) y un apoyo mediático extraordinario. No hay estructura, todo son táctica y emociones y eso, en tiempo de crisis y utilizado por tipos inteligentes es electoralmente muy atractivo. A la vista está que acertó.
Lo que no acertamos ni él ni yo fue a vislumbrar que esa muchachada académica, alegre y fraternal es un grupo indestructible para compartir emociones, pero una bomba de destrucción masiva cuando hay que gestionar parcelas de poder.
Mi querido Miguel Naveros me lo ha dicho siempre: bicho, la universidad es una caja de bombas; cada uno de sus integrantes es un cerebro pensando y, con el pensamiento, no solo se busca el conocimiento, sino también el poder.
Podemos ha pasado, en apenas tres años, de las musas a la vida real. De gestionar emociones a gestionar iniciativas parlamentarias y presupuestos autonómicos y municipales. Y Poder. Sobre todo Poder.
Iglesias podrá ganar o perder esta mañana. Lo que ya es inevitable es que tras el recuento final, sea cual sea el resultado, el proyecto de Podemos ya ha perdido.        





Temas relacionados

para ti

en destaque