En casa - Día 24

Uno lee, escucha y ve tantas informaciones, que no puedo precisar dónde se emplean drones para controlar movimientos, temperaturas corporales y otras especies. Hay quien lo ha tomado como vulneración de la intimidad, otros alegan que son artefactos chivatos en toda regla. Acaba de llegarme un correo electrónico remitido por Google Maps Timeline. Sin querer o sin darme cuenta activé mi historial de ubicaciones. Llevado por la curiosidad consulté la cronología y me detallan doscientos treinta tres sitios en los que he estado según mi historial de ubicaciones. ¡La virgen, con perdón!, me pormenorizan hasta en qué lugar estuve en al año 2016, que, naturalmente, ni recordaba. Hablo con mi amigo Álvaro, ingeniero informático, le expongo el asunto y ríe a carcajada clamorosa. Que no me preocupe, que sí, que algo habré tocado, pero que sin activar nada, en cuanto creas una cuenta en internet, ¡zas!, fichado. Gracias Álvaro, me has inquietado más si cabe.

Una gran amiga me envía un mensaje de esperanza: “…me emocionan los recuerdos, los ojos de un niño, el abrazo cálido de los afectos, la música escondida en un revuelco de espuma. No quiero a los apóstoles del apocalipsis cabalgando insistentes sobre nuestros santuarios más íntimos, no nos van a quitar la esperanza”. La esperanza, ¿cuántas Vírgenes llevan ese nombre? Instalado imaginativamente en mi atalaya, oteo la procesión del Encuentro en Antas. Algo más allá, en Cuevas del Almanzora, el desfile procesional del Santo Entierro del Señor acompañada de cientos de fieles en silencio de respeto y dolor, en el que todas las miradas estaban puestas en el Cristo Yacente. Ante la Virgen, damas con peineta y mantilla. Solo hablan las miradas y las lucecillas de los cirios.

En todos los pueblos, en todas las calles, cuelga el sentimiento de dolor. En Mojácar se reproduce la Pasión a escala. Los diversos pasajes de La Pasión se suceden unos a otros, desde la entrada en Jerusalén hasta la crucifixión y posterior resurrección de Cristo. Cuentan que no es nueva esta descripción visual de la Semana Santa a tamaño reducido, que ya se hace en otros lugares. El Viernes Santo de Albox comienza con el Paso Colorado, con las imágenes de San Juan Evangelista, Virgen del Primer Dolor y Cristo Crucificado; ya en la tarde sale el Paso Blanco con sus pasos Oración en el Huerto, Nuestra Señora de la Esperanza y Nuestra Señora de las Angustias. A media noche, la procesión de Nuestra Señora de la Soledad, del Paso Colorao, en medio del silencio y la oscuridad de la noche, solo rota por las velas y las saetas a la Virgen.

La procesión del Santo Cristo de las Penas avanza por las calles de Uleila del Campo. Detrás, casi todo el pueblo acompaña al Santo Patrón en silencio sólo interrumpido por los sones de la Banda de Música 'Santa Cecilia' de Sorbas. El Santo Entierro de Berja, con las imágenes de El Santo Sepulcro y Nuestra

Señora de la Soledad, se me va perdiendo calle abajo porque ya saben, yo, sin dudarlo, me quedo en casa.