Mujer del médico asesinado: “A alguien no le gustó escuchar la verdad“

Los interrogantes continúan alrededor de la muerte del médico Rafael Piorno en Roquetas de Mar. Una semana después de que el cuerpo sin vida del doctor cubano fuera hallado en el interior de su vivienda de la calle Enrique Granados de Aguadulce, en una tranquila zona de chalets, son muy escasos los detalles acerca de lo que allí ocurrió.

La investigación que lleva a cabo la Policía Judicial de la Guardia Civil de la Comandancia de Almería, que se encuentra bajo secreto de sumario, avanza de manera sigilosa sin que salga a la luz detalle alguno de los hechos que desembocaron en el presunto asesinato del que fuera durante décadas el pediatra de miles de roqueteros.

Hasta el momento, solo se sabe lo que ya adelantó en primicia este periódico después de conocerse que Piorno había sido encontrado muerto en el interior de su vivienda, que estaba a la venta y donde el cartel de 'Se vende' continúa colgado de una ventana siete días después: el cuerpo sin vida del médico estaba cubierto de sangre, con tres puñaladas, un golpe en la cabeza y las manos atadas con bridas; había sangre por las paredes de la vivienda y en la puerta de entrada a la misma, que no estaba forzada, y Piorno llevaba sin dar señales de vida desde el viernes anterior a su hallazgo.

Pero aunque no se conocen nuevos detalles, los comentarios y suposiciones de lo que ocurrió en este chalet de Roquetas de Mar continúan en el entorno más cercano del médico. Primero fue su hijo Miguel quien defendió que en la última llamada que ambos mantuvieron, su padre le habría confesado algunos detalles que podrían ser clave en la investigación. Después, amigos del fallecido aseguraban que su muerte no tendría que ver con un robo ni con su faceta política, ya que Piorno era miembro del Partido Popular de Roquetas y se había presentado en las listas para las últimas elecciones, celebradas el 28 de mayo de 2023.

Hipótesis

Y ahora ha sido su pareja sentimental, con la que había mantenido una relación de 14 años, "los mejores de mi vida", decía, la que ha hablado. Lo ha hecho en el programa Vamos a Ver, de Telecinco, donde, a través de una llamada telefónica, Nataliya Galushchack, quien estaba muy afectada, defendía que lo ocurrido en la vivienda que el doctor tenía a la venta no tenía que ver con un robo.

"Yo creo que no fue un robo. La Policía me ha dicho que no han robado nada, no sé...", apuntaba Galushchack, quien defendía que a Piorno le gustaba decir "a cada uno la verdad", algo que, según su testimonio, podría estar relacionado con el crimen. "El preferia decir a cada uno la verdad a la cara y puede ser que a alguien no le gustó escuchar la verdad", denunciaba.

Y defiende que se mantenga el buen recuerdo de su marido. "Para mí era el mejor del mundo, una persona extrovertida de muy buen corazón y no conozco nadie como él", explicaba en televisión.

Por su parte, su hijo Miguel, como ya hiciera en 'Mañaneros', intervino también en el programa de Telecinco y aseguraba que no descartaba la hipótesis del robo. "Yo no descarto que hayan sido uno, o varios. Yo creo que eso fue un robo que se fue de las manos, que pensaría que en la caja había una caja fuerte, dinero o algo así, pero él no tenía nada de eso. Mi padre era una persona muy humilde, nunca andaba con dinero encima, él no tenía ningún lujo. Creo que se fue de las manos porque mi padre aunque tenía 76 años era una persona fuerte, estaba gordito, pero estaba fuerte", explicaba.