Iñigo Eguaras habrá soñado con Guardado como lo hicieron con Álex Baena esa defensa de cinco formada por Akieme, Ely, Chumi, Kaiky y Pozo, por encajar el gol del delantero más bajo que pisó el área rojiblanca. Eguaras pasaba por allí. Van dos veces y llegará la tercera y la cuarta. No corrige el Almería.
La falta de tensión en un corner se paga muy caro y Guardado, como Álex Baena, marcó los tiempos del remate a gol a placer mientras miraban su acción los llamados a defender con el cuchillo entre los dientes.
La pasividad de la defensa del Almería no es nueva pero Eguaras ni molesta a Guardado haciendo un gol propio de los entrenamientos con Manuel Pellegrini en la Ciudad Deportiva Luis del Sol.
Álex Baena
Cuando el Real Betis marcaba el 2-3 en el Mediterráneo seguro que un roquetero por la televisión recordaría su gol al Almería en el mismo lugar, pero con una defensa aún más poblada en el único partido con Pacheco de titular.
Baena le hizo un gol al Almería con dedicatoria a Llaneza que le costaba la expulsión por ver la segunda amarilla. Ese día el roquetero se marcho con furia del Ciutat de Valencia expulsado de forma injusta.
Guardado
Si el gol de Baena le daba vida al Villarreal para igualar el marcador, el de Guardado le daba los tres puntos al Real Betis y ponía loca a su afición en Almería cortando la mala racha. Tenía que ser en Almería.
Eguaras fue testigo directo de la habilidad del más bajito del Real Betis y seguro que a la próxima saltará o molestará para que al menos se 'curre' el gol. No se puede defender peor una jugada.
Álex Baena fue el primero. Guardado es el segundo... llegarán más.
En los dos aparece Eguaras contemplando y no marcando.