“No sé ni qué decir ni qué pensar”

Es uno de los momentos más difíciles en la historia de la UD Almería y también de los jugadores que forman parte de la plantilla. Desde que volvieron a la pretemporada en julio nunca podrían imaginar que a 26 de noviembre sumarían catorce jornadas sin vencer. Gaizka Garitano es el tercer inquilino del banquillo que va a intentarlo, aunque ya lleva cinco encuentros al frente  y no logrado ni un punto. 

Tras perder 2-1 en Getafe fue Javi Rufete, del gabinete de comunicación del Almería, el que tenía la misión de llevar a un protagonista a la televisión con los derechos del partido, DAZN, y el elegido fue Leo Baptistao. El brasileño, que volvió a sentirse más cómodo en la banda que no de referencia ofensiva, contaba en la televisión que es una pesadilla que se repite sin remedio: “Nos ha pasado más de una vez ya. No sé ni qué decir, ni qué pensar. Empezamos muy bien, tuve la ocasión para el 0-2, no lo conseguimos y nos remontaron. Tenemos que poner la cabeza en su sitio y pasar página cuanto antes para ganar ya un partido”.

Impotencia
Los futbolistas sienten que el Getafe hizo lo justo para ganar mientras que a ellos cualquier esfuerzo les cuesta el doble. Las lágrimas de Chumi que mostraron las cámaras son también las de una afición que continúa viajando por España y acudiendo al Mediterráneo porque hay que estar en buenas y en las malas. Baptistao volvió a pedir que nadie se baje del barco, ya que pese a los continuos contratiempos el Almería está a seis puntos incluso en esta crisis de resultados: “Que siga con nosotros que nos estamos dejando el alma en el campo, haciendo todo lo posible para cambiar la situación”. Pero hay que dejar a un lado las palabras y que haya resultados. Ser último destacado de Primera y sin haber ganado es demasiado peso encima de la plantilla de Garitano.

Vestuario
Decía Centelles que Melero estaba siendo clave en la gestión anímica del grupo porque él estuvo diecinueve partidos sin vencer con el Levante. Esto Baptistao no lo había vivido antes y el único camino es seguir creyendo: “Estar más unidos que nunca, ser profesionales como nunca y seguir trabajando para cambiar la dinámica, no hay otra”. El brasileño entrega todo lo que tiene en el campo y siguen sin llegar los marcadores esperados.