No es el único culpable de que la UD Almería vaya última porque él no formaba parte del organigrama técnico cuando se diseñó la plantilla 2023-2024, pero Gaizka Garitano sabe, como el resto de entrenadores, que vive de los resultados y ni en su peor pesadilla podía verse con cinco partidos y cinco derrotas en Primera División. El vasco de 48 años ya ha diagnosticado alguno de los problemas que arrastra esta plantilla, como la fragilidad defensiva impropia de la categoría, y gracias al mercado de invierno existe la posibilidad de remediarlo. Nunca se hizo tan necesaria la ventana de enero para el club presidido por Turki Al-Sheikh. Después de intentarlo con Vicente Moreno y Alberto Lasarte, este último como interino, se abren tres escenarios para el míster de Derio.
Opción 1
Se nota un Almería más trabajado. El gol de Ramazani en Getafe no es casualidad y sí causalidad. No se ve un equipo sobrepasado por la situación, pero sí por esa debilidad defensiva que le ha llevado a encajar 37 goles y así es imposible. Con más o menos llegadas a puerta, este grupo tiene gol, pero se desangra atrás y el técnico aún no ha sido capaz de dar con la tecla. Si en los próximos cuatro partidos no hay luz verde en forma de victorias, ¿el club podría plantearse la destitución?.
Opción 2
Garitano ha llegado a un vestuario que vive instalado en la tristeza futbolística porque no suma puntos ni cuando hace méritos para ello. La pelota en el tejado de El Assy y Gonçalves. ¿Esperar al mercado de enero independientemente de los resultados ante Betis, Atlético de Madrid, Mallorca y FC Barcelona para firmarle uno o dos centrales y empezar de nuevo la casa desde los cimientos?, es otra de las posibilidades; aguantar con Garitano hasta enero y dotar al equipo de las piezas que le faltan para competir con garantías de éxito, sobre todo fijándose en el eje de la defensa. Garitano ha analizado los problemas y los pondrá encima de la mesa de los jefes para tapar las vías de agua ahora que se acerca el mercado. Los hombres fuertes de Turki también estudian los pros y los contras del banquillo.
Opción 3
Esta sería un golpe de timón importante, y a su vez una decisión que debería ser consensuada a fondo. ¿Tirar hasta el final con Garitano y si hay descenso darle un proyecto ambicioso para volver a Primera?. Sería un mensaje directo a los jugadores y a los aficionados de que se daría una línea de continuidad al banquillo y se demostraría confianza plena en sus posibilidades. Cabe recordar que firmó contrato hasta 2025.
Futuro
Lo que queda claro en los tres escenarios que se abren en el Almería: destitución si no hay resultados, esperar al mercado de invierno para dale mejor materia prima al técnico, o mantenerlo pase lo que pase, es que el club no ha tirado la toalla todavía en esta amarga temporada. La salvación no queda tan lejos y enganchando una o dos victorias el presente y futuro ya se verían diferentes. Garitano vino para ganar y aún no lo logró por mucho que lo está intentando.
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