Juan Rojas: sobran las palabras

Ahora que vuelve a sonar con fuerza el torneo que lleva su nombre. Hoy que su campo de fútbol es de rugby, con Cristiano Ronaldo dando brillo a un partido por el mítico Juan Rojas Peña, llega el momento de mirar a la historia. Para las nuevas generaciones hay que dejarles claro que no solo era un concejal de Deportes que unió para siempre el fútbol de Almería y puso fin a la 'guerra' sin poder verlo. Rojas fue un almeriense que hizo el camino desde la Regional a la Primera División llevando el brazalete de capitán de un Almería del pasado que tanto aman los abuelos de esta provincia.

Rojas era una persona sencilla que se transformaba en el campo. Hablaba 'bajito' pero convencía con su verbo. Tuvo color político porque le llamó su amigo Santi (Santiago Martínez Cabrejas) y nos dejó partidos memorables y goles directos al corazón. Entrenó a Francisco en el Plus Ultra y le tuvimos de comentarista en la Cadena SER junto a Salustiano Polo y Gregorio Mollejo. Polo y Rojas juegan en la Liga de los Ángeles del Cielo y a Gregorio lo tenemos para dar fe de lo que vamos a exponer.

Era Juan Rojas un entrenador de equipos de la ciudad que veraneaba en el Cabo de Gata y jugaba al dominó con el primer alcalde de la democracia con el que jugaba a la pelota. Lo suyo no era la política pero todos los veranos en el Cabo de Gata salía el tema de marras en el sentido de la 'guerra civil' de nuestro fútbol entre Polideportivo y Almería Ceefe. Dijo el alcalde a su vecino del Cabo que tenía que acabar de una vez y le tocaba como capitán que fue de aquel Almería de Primera División. Rojas no era político y le dio muchas vueltas al asunto. Pero se presentó y salía de concejal de Deportes.

El concejal de Deportes

Un infarto acabó con su vida en su plenitud y no pudo ver acabada su obra. A mediados del mes de agosto del año 2000 nos dejaba para siempre cuando tenía toda la operativa en marcha para unir a los dos Almerías. Puso a trabajar en su despacho a dirigentes de ambos clubes y con su mejor aliado, Francisco Martínez, 'Paquitico', en largas sesiones dejó todo en marcha para que un año después de su muerte se dieran la mano los fundadores de los dos equipos de la capital. José Meca y Guillermo Blanes estrecharon sus manos y nacía en el despacho del alcalde amigo de Rojas el Almería que ahora tenemos. Santi fichó en el Cabo de Gata al mejor entrenador del mundo y a un concejal que sin ser político hablaba bajito y convencía a todos. Le podemos recordar como el hombre que puso fin a la división entre los almerienses del fútbol.

El futbolista

Cuando se hizo la Agrupación Deportiva Almería era Juan Rojas futbolista del Plus Ultra y pasó junto a muchos compañeros a entrenar con Santiago Errazquín. El vasco siempre lo tuvo como capitán pese a que el brazalete lo llevó en muchos partidos otro mítico como Juan Goros. Los goles y los pases de Rojas sacaron a aquel Almería de Regional Preferente hacia Tercera División y en esta categoría por los campos de tierra con grandes batallas contra el Córdoba y Tarrasa hasta que Franco Navarro hizo un campo nuevo y aquello se les fue de las manos. Ascenso a Segunda División B, a Segunda y hasta en Primera donde marcó su primer y único gol al Real Zaragoza para darle la victoria al Almería. Luego se puso a entrenar y a ayudar en la gerencia del club. Rojas no cambió de camiseta desde Regional a Primera. Jugaba de extremo derecho pero tenía alma de '9' pese a que no era muy alto.

La persona

Si verlo correr desde Regional a Primera es algo que la vida me regaló, conocerlo en persona y tenerlo de comentarista en la Cadena SER junto a Polo y Gregorio no tiene nombre. Tenía un Mini 1000 para ir al Estadio de La Falange y le gustaba pasar inadvertido. Proyectaba una sencillez de jugador inmensa pero se transformaba en el campo porque se dejaba el alma por su equipo. En las distancias cortas hablaba bajito y me regañaba mucho porque "le das mucha caña al Almería y tú eras socio". Yo le prometía que no volvería a pasar, pero pasaba.

Rojas se metió en política para unir a nuestro fútbol y son testigos de ello Polo y Gregorio. Por cierto que el madrileño le llamaba 'Chiquitillo'. Yo le decía Maestro. Llevaba Almería en el corazón y quería a su tierra con locura. Pudo ganar una fortuna pero no quiso salir de Almería y nos dejaba para siempre porque se le paró de golpe ese corazón rojiblanco y esa pasión con la que hizo todo en la vida. Rojas no jugaba amistosos e iba siempre a por todas.

Menudo fichaje hizo Cabrejas para la política.

¿Qué hubiese sido de nuestro fútbol sin Juan Rojas?