Ya no hay tensión, llamadas, dudas ni ansiedad. Entrenadores y futbolistas pueden centrarse a partir de ahora exclusivamente en la pelota, en la Liga, olvidándose de un mercado veraniego donde por muchas semanas que se den todo queda resuelto al final. A nadie le gusta jugar dos o tres partidos con el plazo abierto, pero tampoco se hace nada por cambiar esta situación.
Como eso ya es pasado, el Almería va a por lo que realmente controla, que es la competición. Llega el Sporting (21:30 horas), un histórico que todavía no ha podido arrancar de verdad porque lleva un punto de seis. Perdió 1-2 con el Levante y no pasó del empate sin goles frente al Eldense.
Peligro
Rubén Albés es un técnico con carácter y afronta su primer desplazamiento con el Sporting. Hasta nueve fichajes han realizado este verano -el exrojiblanco Nikola Maras fue el último- para meterse entre los seis primeros y aspirar a subir de categoría. Jugadores como Otero, Bernal, Cote, Nacho Méndez, Jonathan Dubasin... Buena plantilla que quiere tomarle el pulso a la Liga visitando el Estadio Mediterráneo.
Le gusta tener la pelota, nada de encerrarse, y esto le puede venir bien al Almería. Rubi respira más aliviado con el equipo cerrado hasta enero, viene de ganar 0-1 en Tenerife, y el reto es encadenar dos jornadas ganando. En caso de lograrlo se irán cerrando definitivamente las páginas del descenso. Porque todavía quedan cenizas del incendio del año anterior que poco a poco el grupo pretende ir retirando a base de magníficos resultados junto a la afición.
En cuanto a la alineación no se va a notar demasiado el efecto del mercado. Podría repetir sin problemas la alineación del Heliodoro Rodríguez López o dar entrada a otros futbolistas como Dion Lopy, Iddrisu Baba, Lucas Robertone y hasta Leo Baptistao. A destacar Marc Pubill, una venta que parecía segura al Atalanta se truncó y al menos hasta enero defenderá la camiseta del Almería. Un premio para el cuerpo técnico y para los aficionados, que hoy le aplaudirán tras conquistar el oro olímpico.
Regularidad
Segunda es la Liga sin guion. Nadie ha destacado por encima del resto hasta la fecha, se ven auténticos partidazos, los descendidos de Primera sufren y la victoria cuesta mucho sudor. En el Almería están tranquilos porque ha logrado generar suficiente peligro a Racing de Santander y Tenerife, justo lo que solicitaba Rubi, para ir poco a poco ensamblando las piezas y ofrecer menos oportunidades al rival.
Probablemente el mejor ataque de la categoría lo tenga el Almería, siendo la punta de referencia Luis Suárez. Ya avisaba Paco López, míster del Cádiz, que “ahora mismo las mejores plantillas son las de Almería y Granada”. Arriba no les hace falta mucho para hacer gol y eso provoca nervios. En cuanto al ambiente se espera una magnífica entrada, con fan zone desde tres horas antes en fondo norte. Vuelve el fútbol sin mirar al mercado. Ahora empieza de verdad la Segunda División.
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